El exdiputado nacional del PSOE y excandidato a la Alcaldía de Huércal-Overa (Almería) ha anunciado este martes su intención de concurrir como candidato al próximo congreso provincial del PSOE de Almería con el apoyo de los 'sanchistas', con lo que su proyecto será alternativa al que muestre el actual secretario general del PSOE, José Luis Sánchez Teruel, a la espera de que se confirme un tercer candidato, dado que el senador y portavoz del grupo municipal del PSOE en el Ayuntamiento, Juan Carlos Pérez Navas, aún sopesa una postura firme al respecto.
López Olmo, quien en noviembre del pasado año abandonó la Ejecutiva Provincial del partido, de la que era vocal, por sus “discrepancias” con la dirección del mismo ante la abstención en la investidura de Mariano Rajoy; ha adoptado la decisión de encabezar una lista después del cónclave que reunió en la noche de este lunes a diversos miembros de distintas agrupaciones municipales con el objetivo de crear un proyecto que “ilusione” a la militancia.
El precandidato se ha mostrado partidario de impulsar un proyecto que “empodere a la militancia” a partir de las resoluciones adoptadas en el 39 Congreso Federal del PSOE para así “estar en condiciones” de ganar las elecciones al PP, según ha indicado en declaraciones en la Cadena Ser recogidas por Europa Press previas a la presentación oficial de su precandidatura este miércoles en la sede de la Agrupación Municipal del PSOE de la capital.
En este sentido, ha asegurado que está dispuesto a capitanear la candidatura e ir “a por esos avales” sea cual sea la cantidad que fije el próximo 1 de septiembre el comité provincial socialista, que tiene la posibilidad establecer un 20 por ciento de avales para proponer candidatura o un tres por ciento en virtud de lo decidido en la Ejecutiva Federal.
López Olmo, quien fue seguidor de la corriente 'No es no', ya aseguró en su carta de renuncia a la actual Ejecutiva Provincial que había llegado la hora de que los militantes eligieran “libremente en primarias y con voto en urna quien ha de timonear un nuevo tiempo” en el PSOE puesto que lo contrario suponía “ahondar más en la distancia entre la militancia y los cuadros dirigentes del partido”.