La mujer detenida por el crimen del pequeño Gabriel Cruz ha confesado que ella es la autora del crimen. En una declaración en la sede de la Guardia Civil, Ana Julia Quezada ha contado esta mañana a los investigadores que condujo al niño a la finca donde apareció el cadáver y que lo dejó inconsciente con la parte roma de un hacha porque el niño, siempre según su versión, se había enfadado con ella y la había agredido, aseguran fuentes próximas a la investigación.
A pesar de haberse mantenido firme en las primeras horas tras su detención, ocurrida el domingo, esta mañana Ana Julia Quezada se ha derrumbado y ha confesado el crimen en una declaración que se ha extendido durante una hora y media aproximadamente. Durante su relato no aparece implicada ninguna persona más.
Según su relato, se llevó al niño a la finca de Rodalquilar, a la que acudía regularmente porque allí se iba a trasladar a vivir junto al padre de Gabriel y estaba acondicionándola. En un momento, ha dicho la presunta asesina, el niño se enfadó con ella y empezó a agredirla, a lo que ella respondió golpeándolo con la el mango de un hacha que los agentes aún no han encontrado. El niño, siempre según su relato, quedó inconsciente, ella se puso nerviosa y decidió asfixiarlo tapándole nariz y boca.
A continuación, ha relatado Quezada, arrojó el cuerpo a una acequia, encima de la cual echó tierra. Recogió la ropa y condujo hasta una urbanización de la zona, de nombre Retamar, en cuyos contenedores arrojó un pantalón de chándal, una sudadera roja con capucha y las zapatillas de deporte. Los agentes se han dirigido al lugar y ya han encontrado la ropa, según las mismas fuentes.
La mujer de 43 años y de origen dominicano fue detenida por su presunta implicación en la muerte del niño Gabriel Cruz cuando trasladaba el domingo su cuerpo en el maletero de un coche. Según ha dicho su abogada de oficio a la salida de la comandancia, Quezada ha respondido “a todas las preguntas”, informa Europa Press.
La letrada Beatriz Gámez ha asegurado a preguntas de la prensa tras abandonar la Comandancia de la Guardia Civil que la única sospechosa por la muerte de Gabriel se ha prestado a “colaborar” con los agentes, al tiempo que ha asegurado que este martes ha sido la “primera vez” que los especialistas le han pedido que hablara sobre lo ocurrido.
La Guardia Civil trabaja este martes a contrarreloj para recabar pruebas al objeto de elaborar un atestado lo más completo posible para que, junto con el informe de la autopsia, se aporten pruebas sólidas al juez que instruye la muerte del niño Gabriel Cruz.
Hasta Almería se ha desplazado el coronel Manuel Sánchez Corbí, jefe de la Unidad Central Operativa (UCO), al que se vio salir del registro practicado ayer por la tarde en la vivienda de Puebla de Vícar a la que se dirigía Ana Julia Quedaza el domingo en el momento de su detención, cuando transportaba en el maletero de su coche al pequeño Gabriel.