No existe la especialidad, pero sí la categoría. Al menos en el resto de España. Los médicos que trabajan en los servicios andaluces de urgencias hospitalarias se encuentran en un limbo profesional. Así lo denuncia el Sindicato Médico Andaluz (SMA), que asegura que sus facultativos no pueden trasladarse a ningún punto de España porque Andalucía lleva un retraso de 15 años en la creación de una categoría de urgencia hospitalaria que equipare sus condiciones al resto de comunidades autónomas.
El Servicio Andaluz de Salud ya cuenta con un proyecto de Orden para la creación de la categoría de médico de urgencias. El pasado 28 de julio, todos los sindicatos estaban convocados para debatir el proyecto, pero a última hora se retiró del orden del día de la mesa sectorial. ¿La razón? Según fuentes de la Consejería de Salud consultadas por eldiario.es/andalucia se habían registrado muchas alegaciones y no hubo tiempo de analizarlas a tiempo. Las negociaciones con los sindicatos se han pospuesto hasta después del verano.
Comisiones Obreras, en cambio, achaca la decisión a sus presiones contra un proyecto al que “ha mostrado su total oposición”, por considerar que el borrador de la Orden aumenta la carga de trabajo, afecta a la “continuidad asistencial” y ofrece un “servicio desestructurado” con demasiados turnos, profesionales “con diferentes titulaciones” y que “dificulta la formación”.
Una asignatura pendiente
En el Sindicato Médico Andaluz, que es mayoritario entre los facultativos andaluces, no ha sentado nada bien la postura de CCOO. Según Rafael Carrasco, portavoz de SMA, “Comisiones Obreras distorsiona la realidad y disfraza con sus argumentos una oposición radical que no terminamos de entender. Estamos a favor de la creación de la categoría, porque es lo que quiere la inmensa mayoría de los médicos de urgencia. Otra cosa son las condiciones, ya que no compartimos la primera oferta que nos ha hecho el SAS ni en cuanto a condiciones laborales ni salariales”.
Desde Semes Andalucía, una sociedad científica especializada en los servicios de urgencias, aseguran que “esta disposición es una asignatura pendiente de la administración andaluza con los profesionales y los Servicios de Urgencias Hospitalarios de nuestra comunidad”.
Según SMA, mientras se crea la especialidad de “urgenciólogo” (que depende del Gobierno central y que ya existe en el resto de países de la Unión Europea), la categoría (que depende de las comunidades autónomas) les permitiría, por un lado, atender con mayor profesionalidad a los pacientes y, por otro, mejorar sus condiciones laborales.
“Hay que dignificar las urgencias”
Actualmente la atención de urgencia está considerada una categoría de médicos de familia, que pueden trabajar tanto en la atención primaria como en urgencias. De ese modo, “cualquier médico de familia puede pedir traslado y venirse a trabajar a recibir infartos, politraumatismos y quemaduras de tercer grado, aunque esa persona haya estado trabajando hasta ese momento con abuelos hipertensos en los barrios. Hay que dignificar las urgencias. El que esté es porque quiera estar, no porque esté de rebote”, recalcan desde SMA.
Es decir, un médico de familia puede pasar de atención primaria a urgencias, y viceversa, pero un médico de urgencias no puede pedir el traslado a los servicios de urgencias de un hospital de otra comunidad autónoma porque Andalucía no ha creado aún dicha categoría.
Actualmente, además de médicos de familia, en los servicios de urgencia andaluces hay facultativos de diferentes especialidades (internistas, alergólogos, endocrinos, intensivistas…) a los que se contrata en su especialidad y luego se adscribe al servicio de urgencias, “gente que vale, pero que se le contrata por la puerta de atrás, porque oficialmente no es posible contratarlos como urgenciólogos”, subraya Carrasco.
Jesús Cabrera, responsable de negociación colectiva en Sanidad de CCOO, asegura que “estamos de acuerdo con la especialidad, pero no con la categoría”, abundando precisamente en que los médicos de urgencia sí se pueden trasladar ahora a atención primaria, pero que con la categoría de urgenciólogo “se pierde esta posibilidad”.
Cabrera sostiene que hay una “división importante” entre los facultativos andaluces que trabajan en el servicio de urgencias y que convocar la mesa técnica para después del verano les “permite debatir de manera sosegada” la creación de la categoría de médico de urgencia hospitalaria.
Será entonces cuando se decida si Andalucía se equipara al resto de comunidades autónomas y en qué condiciones lo hace.