Un 6 sobre 10 es la nota que han obtenido la mayoría de sanitarios andaluces por su trabajo en 2021. Esa es la calificación que les ha otorgado el Servicio Andaluz de Salud (SAS), generando un clima de malestar entre profesionales y sanitarios. Más allá del hecho de que se valore tan a la baja su desempeño, esta nota tiene una influencia directa en el salario que cobran. En concreto, han percibido menos complemento por productividad conocido como CRP. Salud se limita a recordar que este extra salarial se paga en función de objetivos de los que esta vez, aseguran, solo se han cubierto el 68,98%.
Todos los sanitarios andaluces están sometidos a un análisis de su trabajo y en función de las metas, establecidas cada año, cobran más o menos Complemento de Rendimiento Profesional (CRP). En 2021 ya hubo controversia porque Andalucía valoró con un 7 de media el esfuerzo de sus trabajadores del SAS durante la pandemia de 2020. Un hecho que enfadó a los afectados al sentir que no se había valorado su esfuerzo en un momento en el que se enfrentaban a un virus desconocido que acabó con la vida de muchos de ellos. Entonces, denunciaron que la única voluntad que perseguía el SAS con esa nota era pagarles menos complemento.
Un año después, la sorpresa ha llegado en la nómina de octubre. Tras analizarlas, los sindicatos han podido comprobar que la nota en esta ocasión es aún más baja que en 2021. La media se sitúa en un 6 sobre 10, aunque hay profesionales que han obtenido menos y otros que más, afectando directamente al CRP que han cobrado y que se abona en dos partes. La primera, pagada en mayo y la segunda, hace tan solo dos semanas, han permitido hacer un cálculo que arroja el recorte del SAS en materia de rendimiento profesional.
Este complemento se calcula en función de objetivos individuales y colectivos que quedan fijados en cada centro de trabajo por las direcciones y con el visto bueno del SAS. Lo que viene a hacer Salud al valorar a la mayoría con un 6 es sostener que estos objetivos se han quedado lejos de ser cumplidos totalmente y que por ello han de percibir menos CRP. Según datos de los sindicatos, esta merma supone hasta 2.000 euros al año en el caso de los médicos y 1.000 en el caso de los enfermeros, siendo menor en el resto de categorías.
Un complemento “mecanismo de descontento”
Por este motivo, profesionales como Blanca Cáceres, médico de familia en Andalucía, califican de “vergonzoso” que el SAS les haya recortado su complemento pese al trabajo que realizan. “Esto es otro maltrato institucional más”. En su caso, y en el de muchos otros galenos de cabecera, la carga media de pacientes al día ronda las 60 personas, haciendo que sus jornadas laborales sean extenuantes e impidiendo que puedan tratar a los enfermos como es debido.
Rafael Carrasco, portavoz del Sindicato Médico Andaluz, ve de forma “absolutamente negativa” la nota que les ha puesto el SAS. “Consideramos que después de estos años de pandemia es inadmisible que la Administración valore peor a sus facultativos que han sido los que han sacado adelante esta situación”. Por otra parte, denuncia que solo se enteran del recorte “cuando ya se ha abonado el CRP”, impidiendo que pueda ser revisado previamente. “El CRP se está convirtiendo así en un mecanismo de desincentivación y descontento”.
“La valoración es falsa”
En el caso de los enfermeros, que de media han perdido 1.000 euros en este complemento, la situación no es mejor. De hecho, desde SATSE han pedido una reunión urgente al SAS para “aclarar los criterios aplicados en el reparto del CRP”. José Sánchez, portavoz andaluz de este sindicato, asegura que están “estudiando la adopción de movilizaciones si no se aclara esta reducción del 6% con respecto al año anterior o incluso acudir a los tribunales”. “Hemos vuelto a solicitar en el escrito, como ya se hiciera en años anteriores, que se abone a los profesionales el 100% de la cuantía máxima del CRP sin necesidad de evaluación de objetivos”.
“Hay que tener en cuenta el esfuerzo que realizaron los profesionales en la gestión de la pandemia de la Covid-19, que sobrepasa con creces cualquier objetivo impuesto por el SAS”, dice Sánchez. En ese sentido, el resto de sindicatos van de la mano. Victorino Girela de CSIF califica de “incierto” que se haya producido una merma de hasta un 20% en la productividad de los trabajadores. “El CRP de 2021, con la pandemia todavía causando estragos, contagios de profesionales y bajas no cubiertas, donde se nos pidió priorizar teleconsultas y otras actividades para reducir listas de espera y cirugías, en nuestra opinión es injusto y mezquino y supone un nuevo recorte”.
“Por segundo año consecutivo se nos paga sin haberse informado previamente la evaluación de objetivos (no sabemos si se han convocado las comisiones de centro de evaluación de CRP), por tanto, supone oscurantismo y probablemente un incumplimiento de lo que recoge el procedimiento”. Por todo ello, en CSIF advierten de que se van a movilizar para que quede claro su descontento. Algo similar a lo que dicen en CCOO: “Exigimos al SAS que revise esta valoración de inmediato, que se considere este pago de octubre un nuevo pago a cuenta y que el SAS pague a sus trabajadores lo que se merecen”.
En CCOO proponen dos soluciones a este problema: “Eliminar el CRP e incluir estas cantidades como conceptos fijos en las nóminas”. Aseguran que es una cuestión de “dignidad” para sus trabajadores. “Esta valoración del desempeño profesional es falsa. Obedece a un solo objetivo: pagar lo menos posible”. Por eso, desde UGT proponen un calendario de movilizaciones que empieza este mismo jueves para visibilizar su descontento. Al mismo tiempo, esta sección sindical exige que el complemento se convierta en “factor fijo” que se pague al completo. “Basta ya de engañar con falsas evaluaciones y con objetivos que nadie conoce ni negocia”.
Por su parte, la Consejería de Salud defiende la valoración realizada. Fuentes oficiales recuerdan que este complemento “está ligado a la consecución de objetivos destinados a mejorar la calidad asistencial prestada, que se evalúa teniendo en cuenta criterios tanto individuales como de la unidad a la que esté adscrito cada profesional, percibiéndose dicho pago por rendimiento evaluado del año anterior”. En función a ese criterio, dicen que en 2020 los objetivos se alcanzaron en un 72,91% y en 2021 esta cifra ha bajado al 68,98%. “Los profesionales pueden consultar el detalle del abono del CRP y el porcentaje de objetivos logrados tanto individuales como de la unidad a la que pertenecen en el apartado ‘e-atención al profesional’ de la página web del SAS”, zanjan desde Salud.