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Opinión - Cada día un Vietnam. Por Esther Palomera

Antonio Banderas y José Andrés reprochan a la Junta de Andalucía el cierre de las escuelas de hostelería

La noticia de la paralización de las clases en La Cónsula y La Fonda, las dos escuelas de hostelería de Málaga, ha provocado la reacción de personalidades del mundo de la cocina o vinculadas con la provincia. Las respuestas oscilan entre la incredulidad y la abierta indignación con los responsables políticos de la Junta de Andalucía, incapaces de dar solución a unos problemas económicos y administrativos que se reproducen desde hace tres años. “¿Se han comido sus palabras? Triste sobremesa para La Cónsula”, ha escrito el actor Antonio Banderas en Twitter, bajo la etiqueta #SalvemosLaCónsula.

Dani García, que antes de obtener sus dos estrellas Michelin se formó en La Cónsula, dice que “no sabe qué hacer, qué decir…”. Su colega de profesión, el televisivo José Andrés (muy popular en Estados Unidos) ha interpelado directamente a la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, a la que se ha dirigido en Twitter. De momento, no hay respuesta de Susana Díaz (mal citada en la red social), y sí de Dani García: “Hay que seguir luchando porque... Somos Andaluces. Somos turismo. Somos gastronomía. Y necesitamos formación!”.

Igualmente, a la etiqueta #SalvemosLaCónsula se han sumado ciudadanos y personajes como la actriz Remedios Cervantes, que pide políticos “a su altura”. La etiqueta se ha recuperado de la primera quincena de diciembre, cuando los alumnos mantuvieron un encierro en protesta por los impagos a los profesores y las dificultades para recibir clases prácticas con normalidad. Cocineros como Alberto Chicote, Ferrán Adriá o David Muñoz apoyaron entonces la protesta.

Profesores y alumnos hace tiempo que hablan de “cachondeo” y “vergüenza”, de situaciones “desquiciantes” y políticos “inútiles”. Con la pregunta “¿Se han comido sus palabras?”, Antonio Banderas hacía referencia al reiterado incumplimiento de plazos y promesas en el que han incurrido altos cargos de la administración. En diciembre de 2014, la presidenta de la Junta de Andalucía aseguró que La Cónsula retomaría sus clases con normalidad a la vuelta de las navidades. Eso fue hace un año, y no ha ocurrido.

En los 12 meses que han transcurrido desde entonces el Consejero de Empleo, José Sánchez Maldonado, empeñó su palabra varias veces, y la propia Susana Díaz se reunió con los alumnos apenas una semana antes de las elecciones autonómicas de marzo y les prometió solucionar el problema en “10 días”. El último plazo incumplido ha sido el 31 de diciembre: la auditoría estaría lista para esa fecha y no se ha empezado porque falta un informe previo.

José Antonio Castro, portavoz de parlamentario de IU, ha acusado al Gobierno de Andalucía de incurrir en “prevaricación política”, “engañar” y dejar morir las escuelas, y ha pedido la convocatoria urgente del consejero. Mientras, Juan Manuel Moreno, líder del PP-A, asegura que “es otro compromiso más de los que presidenta dijo que iba a resolver de manera inmediata”.