Tres aspirantes se disputarán la secretaría general del Partido Comunista de Andalucía

En su duodécimo congreso el Partido Comunista de Andalucía (PCA), que con más de 4.000 militantes supone prácticamente la mitad del PCE, se juega mucho más que determinar una nueva secretaría general, cuando su objetivo es una “revolución organizativa”. Pero lo cierto es que la decisión en torno a su liderazgo siempre despierta interés y en este caso son ya tres las personas que han mostrado disposición a tomar el testigo de José Manuel Mariscal, que lo deja tras siete años, entre otras cosas porque cree en “la limitación de mandatos”.

De este modo, a la conocida pretensión del diputado de IU por Sevilla Miguel Ángel Bustamante de optar a la secretaría general, según ha podido saber eldiario.es/andalucia, se han sumado movimientos por parte de la exconsejera de Fomento y Vivienda y actual diputada en el Parlamento de Andalucía, Elena Cortés, y el responsable de Acción Política y Relaciones Políticas de IU en la ejecutiva de Alberto Garzón, Ernesto Alba.

El objetivo del actual secretario general, también expresado por el coordinador regional de IU, Antonio Maíllo, es que finalmente haya una candidatura de unidad encaminada a apostar por “un bloque rupturista y autonomista hacia el partido conflicto”. Y en esta integración se está trabajando, según fuentes del PCA, pero siempre teniendo en cuenta que “lo primero es el debate de las ideas”.

De hecho, en el congreso no se elige un secretario general, sino un comité central que luego decide, entre sus miembros, la persona que lleva la responsabilidad de la secretaría general. En este sentido, uno de estos precandidatos expone: “Coincido con Antonio Maíllo en que hay que hacer que las diferencias que hay dentro del debate se encaucen democráticamente y que lo que decidan los militantes sea algo que provoque la unidad”. Y será, con toda probabilidad uno de estos tres:

Con más posibilidades que ninguno, Ernesto Alba (Cádiz, 1982). Trabajador social y concejal de Conil de la Frontera (Cádiz), con responsabilidades en el gobierno local, hasta que accedió a su cargo en la organización a nivel federal, es uno de los estrechos colaboradores de Alberto Garzón. Su tarea se centra precisamente en uno de los retos que tiene IU por delante con el horizonte electoral de 2019: la confluencia con otros partidos y movimientos sociales. De hecho, es el encargado de la estrategia de construcción de un nuevo movimiento político y social que es por lo que apuesta el PCA en el debate que aborda en este congreso.

Por su parte, Elena Cortés (Priego de Córdoba, 1973) ocupa actualmente escaño en el Parlamento de Andalucía. Con esta socióloga de consejera de Fomento y Vivienda, durante la pasada legislatura del PSOE con IU en la Junta de Andalucía, se puso en marcha la Ley de la Función Social de la Vivienda, una de las más audaces del Gobierno del Andalucía y que finalmente terminó tumbada por el Tribunal Constitucional en varios de sus artículos más controvertidos. La diputada no ha hablado de su candidatura, que en cualquier caso supondría incorporar por primera vez un rostro de mujer en la dirección del PCA.

Lo cierto es que Miguel Ángel Bustamante (Écija, Sevilla, 1984) es el único que ha manifestado sus intenciones a la prensa. Sostiene que el modelo de partido que propone apuesta por seguir adelante con el proceso de unidad popular. Defiende también la recuperación de competencias del PCA, tanto económicas como políticas, “para fortalecer al partido”. En este sentido, este maestro de profesión apuesta por que IU “no tenga el título de partido, sino que sea un movimiento político y social donde la gente participe, donde no sea necesaria la militancia sino que sea un espacio de coordinación de activistas”. De manera que el PCA “recupere competencias e interactúe como sujeto político propio en el proceso de unidad popular, sin delegar ninguna función ni competencia en IU”, tal y como ha expresado tras postularse.