El mapa político que deja la cita electoral de este 26 de mayo en Andalucía trae cambios en las capitales andaluzas. Como viene siendo habitual de un tiempo a esta parte, los que ganan no siempre son los que gobiernan. Y así va a suceder.
El PSOE habría ganado en las capitales de Sevilla, Huelva, Jaén y Granada. El PP en Málaga y Almería. En Córdoba PP ganaría en votos pero empata en concejales con el PSOE, aunque la suma le daría la alcaldía a los populares.Y José María González Kichi, de Adelante Andalucía, revalidaría holgadamente la alcaldía de Cádiz.
Sin embargo, la suma de fuerzas a la derecha puede agriar la victoria socialista en Granada capital, la primera en 30 años. El PP podría gobernar con el apoyo de Cs y Vox. Con lo que, de cuatro capitales en las que gobernaban los socialistas, se quedarían con tres. El PP mantendría Málaga, Almería y tendría posibilidades de sumar, no sólo en Granada, si no en Córdoba. Porque en Córdoba el PP gobernaría con la suma de las derechas. Tampoco en Jaén los once concejales del PSOE le van a permitir gobernar porque la suma de las tres derechas da los 14 concejales necesarios para la mayoría absoluta.
En Sevilla, en concreto, Juan Espadas logra la victoria con 13 diputados, lo que le permitirá gobernar en solitario con apoyos puntuales de Adelante Andalucía o Ciudadanos, como lo ha hecho hasta ahora con solo 11 diputados, o buscar acuerdos más estables. Entonces fue el antiguo Participa el que respaldó al socialista en la investidura. Ahora, Adelante Andalucía ha sumado cuatro concejales (uno menos que la suma de Participa e IU en 2015). El PP, con Beltrán Pérez a la cabeza, pierde fuerza con cuatro concejales menos (obtiene 8). Dos de ellos parecen haberse ido al partido de extrema derecha Vox y al incremento de un concejal para Ciudadanos, que alcanzaría 4.
Francisco de la Torre (PP) revalidará la alcaldía en Málaga por sexta legislatura consecutiva si logra ponerse de acuerdo con Ciudadanos (algo previsible), que con sus dos concejales le podría dar la mayoría absoluta a pesar de que los naranjas hayan perdido un concejal en el Consistorio malagueño. Se repetiría así el pacto de la anterior legislatura que se rompió abruptamente meses antes de los comicios. El PSOE experimenta un aumento significativo de tres concejales (obtiene 12) y Adelante Andalucía obtiene 3 escaños (frente a los cuatro de Málaga Ahora, que obtuvo 4 en 2015 y no ha logrado ninguno en esta ocasión, y los dos de IU en la convocatoria anterior).
Muchas miradas estaban puestas en la entrada de los de Abascal en los Consistorios andaluces tras su importante subida tanto en los comicios autonómicos como en las generales. En el caso de las capitales, Vox ha entrado en esta convocatoria en seis de las ocho principales ciudades andaluzas. Sólo en Málaga y Cádiz, el partido de extrema derecha no ha podido sumar concejales. Así, han irrumpido en Sevilla, Almería, Córdoba, Huelva y Jaén con dos concejales; y con tres en Granada.
La constitución de los Ayuntamientos, el 15 de junio
Hace cuatro años, el PP salvaba por los pelos la victoria en las capitales pero, de gobernar las ocho capitales, los populares perdieron Huelva la misma noche electoral. En Sevilla y Córdoba terminó gobernado por el PSOE gracias a acuerdos con otras fuerzas, esencialmente a su izquierda. Y en Cádiz pasó otro tanto con la candidatura de José María González Kichi, que dejó a las populares sin el Ayuntamiento terminando con la década de Teófila Martínez gracias al respaldo de los socialistas. A mitad de mandato, los populares perdían también Granada tras la detención del alcalde Torres Hurtado en el marco de la Operación Nazarí. Una moción de censura permitió a Francisco Cuenca convertirse en alcalde con los votos de Ciudadanos, Vamos Granada e IU.
Hasta el próximo 15 de junio, cuando se constituyan los ayuntamientos de los 786 municipios, no se sabrá con certeza quién va a ostentar todos los bastones de mando, y quién suma o resta poder en los municipios. Sin embargo, todo apunta a que los pactos han llegado a la política andaluza para quedarse, y que le permitirán al PP resistir en sus feudos tradicionales con el respaldo de otros partidos, arrebatar Córdoba a los socialistas, y recuperar un poder en las capitales que había perdido.