La sociedad onubense ha decidido pasar a la acción y mostrar en la calle su rechazo a la exasperante lentitud que están mostrando las administraciones a la hora de eliminar las balsas de fosfoyesos consecuencia del trabajo de Fertiberia. Y quien ha decidido pasar a la acción es la Mesa de la Ría, entidad que reclama como acción global la recuperación para la ciudad de Huelva de los terrenos que ocupa el Polo Químico, y como paso inicial las 1.200 hectáreas de residuos tóxicos de los fosfoyesos.
Este viernes, aparentemente, se dieron dos pasos, de hecho, ya que todos los grupos políticos con representación municipal en el Ayuntamiento pusieron en marcha la mesa que le da oficialidad a un acuerdo plenario que les obliga a ponerse a trabajar para que la basura tóxica desaparezca, y el suelo que ocupa sea recuperado para la ciudad sin más dilación.
Un gesto que la Mesa de la Ría considera más una pose que otra cosa, por lo que ha convocado una manifestación ciudadana para el próximo 9 de octubre, con objeto de exigir la retirada total y definitiva de los fosfoyesos. Esta organización, considera que se trata de un momento clave y determinante para la ciudad. Los integrantes de la Mesa no se creen los planes de Fertiberia, y no ven factible lo que pretende. El Plan que ha presentado contempla un plan de restauración para las balsas consistente en cubrirlas con una capa de tierra vegetal, lo cual supondría que los citados residuos no se retirarían.
“Nos jugamos un derecho constitucional”
A pesar del tiempo que queda por delante, la manifestación ya tiene recorrido. Partirá desde la plaza de la Merced de la capital, a las 20.00 horas, y concluirá en la Plaza de las Monjas. Casi será el mismo recorrido que la celebrada once años atrás, cuando los ciudadanos de Huelva se echaron a la calle bajo el lema de “No a la Térmica”.
Desde la Mesa de la Ría se hace un llamamiento ciudadano para esta convocatoria, ya que estiman que “nos estamos jugando el derecho Constitucional al disfrute de un medio ambiente adecuado tanteo de nuestra generación como de las venideras”.
Buscando el consenso para resolver el problema
Mientras la Mesa hacía pública su propuesta, el alcalde de Huelva, Pedro Rodríguez (PP), presidía una reunión de los portavoces de los grupos políticos con representación municipal, --Francisco Moro (PP), Gabriel Cruz (PSOE), Pedro Jiménez (IU) y Yolanda Cabezas (concejal no adscrita -ex de Mesa de la Ría), creando una mesa de participación con el objetivo de buscar el máximo consenso posible para la resolución del problema de las balsas de fosfoyesos.
Con este primer encuentro, tanto el alcalde como los portavoces de los grupos políticos han acordado, como primera acción, convocar a las dos administraciones competentes en la resolución del problema de las balsas de fosfoyesos, Junta de Andalucía y Gobierno central, a una próxima reunión que sirva como encuentro preparatorio para la constitución formal de la mesa de participación.
“Recurriremos, porque no es ajustada a derecho”
En este punto, eldiario.es/andalucia ha intentado de forma reiterada recabar la opinión del Ministerio de Medio Ambiente, la administración que denunció a Fertiberia en su día y provocó la sentencia final del Tribunal Supremo. Sin respuesta de esta administración, la Junta de Andalucía se ha remitido a la “absoluta convicción” de que la sanción impuesta a Fertiberia por no presentar el proyecto de recuperación de las balsas a tiempo es la adecuada. Esto es, que los 240.400 euros que la administración andaluza ha impuesto a la empresa sería la adecuada por presentar su proyecto seis meses más tarde de lo fijado, y además hacerlo en inglés.
A falta de la versión del MAGRAMA, el director de la planta de Fertiberia en Huelva, Roberto Ibáñez, asegura que recurrirán una multa “que no es ajustada a derecho, que analizaremos cuando la recibamos oficialmente, pero pensamos que la cuantía no es la adecuada, sobre todo, porque tenemos un compromiso serio de proceder a la clausura de las balsas de los fosfoyesos”.
Ibáñez defiende que Fertiberia ha presentado “un proyecto de ingeniería básica encabezado por la empresa Ardaman Asociates, ”que ha clausurado más de 60 balsas en todo el mundo, y es especialista“.
Sobre la polémica suscitada por presentar el proyecto en inglés, asegura que fue la propia empresa la que lo mandó así a Fertiberia, “y por celeridad lo enviamos así a la Junta, pero unos quince días después lo enviamos ya en español. Todo forma parte de la mejor voluntad, de apremiar el tiempo, por lo que presentamos la ingenería básica tal como nos llegó, y venía en inglés.