Récord mundial y solidario: subir en bicicleta la torre más alta de Andalucía para alcanzar la “Planta Zero”

Sin bajar de su bicicleta, Pablo Adame ha subido cuatro veces las 37 plantas de Torre Sevilla, el edificio más elevado de Andalucía. Con esta hazaña deportiva que encierra una metáfora, el ciclista onubense ha logrado firmar un récord mundial. Pero también ha servido para lanzar “un mensaje de esperanza” a los adolescentes que se enfrentan a otro reto igual de difícil y empinado: vencer el cáncer.

Si el campeón del mundo de ciclismo de trial ha subido 3.724 escalones en 3 horas y 45 minutos, ha sido para visibilizar el proyecto 'Planta Zero' que lidera la Asociación de Padres de Niños con Cáncer en Andalucía (Andex). La meta es en realidad construir la futura unidad de oncología para adolescentes en el Hospital Virgen del Rocío. “Una necesidad”, como afirma a este periódico Blanca Gastalver, coordinadora del proyecto. Y lo es porque el índice de supervivencia en este rango de edad es del 40%, dato inferior al porcentaje de los adultos (60%) y la mitad que el valor de los niños (80%), según cifras de Andex.

“Es un porcentaje muy bajo”, señala Blanca, que lo relaciona con el hecho de que en la adolescencia, los pacientes “no cuenten con un protocolo específico para ellos” ni tampoco con “un lugar donde luchar”, como reza el lema de 'Planta Zero'. Algo que sin duda “les afecta durante el proceso oncológico, donde es muy importante el estado de ánimo”, puntualiza Blanca.

En un limbo

Actualmente, en territorio nacional solo Madrid ofrece zonas específicas para los adolescentes que atraviesan esta enfermedad. En el resto del país, los adolescentes diagnosticados con cáncer están “en tierra de nadie”. Con adultos o con niños. “Nuestro récord es poner a Andalucía en el centro de referencia en la oncología infantil”, informan desde la entidad. Y aumentar así el nivel de supervivencia de los jóvenes, ofreciéndoles un entorno acorde a las necesidades y características de estos pacientes.

Para lograrlo, desde Andex llevan tres años trabajando por sacar adelante este proyecto pionero a nivel andaluz. Reconocen que ha sido “un proceso complicado” acentuado por el parón de la pandemia que ha afectado a los pacientes de una enfermedad que “estaba antes de la Covid, está y estará”, como recuerda la coordinadora.

En la escalada hasta la cima de Planta Zero, hoy se encuentran a mitad de camino: han recaudado algo más de un millón de euros de los dos que necesitan para completar la unidad. “Pero hay que empezar ya”, asevera Blanca. Por eso esperan arrancar con las obras dentro de tres meses mientras continúan sumando apoyos que impulsen el proyecto hasta el final. Entretanto, los adolescentes a los que atienden y prestan apoyo psicológico desde Andex aguardan “con muchas ganas” el día en que puedan abrir las puertas de ese ring desde el que combatir la enfermedad.

El corazón del proyecto

“Si Pablo ha sido capaz de batir el récord, nosotros tenemos que conseguir el nuestro”. Desde la terraza de Torre Sevilla, rozando el cielo, Blanca se muestra convencida de que lo van a lograr. Ya lo hicieron en 2002 con la apertura de la Unidad Oncohematológica Pediátrica y en 2013 con la Unidad de día, rememora la coordinadora. Y para este tercer asalto cuentan de nuevo con el generoso respaldo de la sociedad sevillana, andaluza y más allá, pues reconoce que también reciben donativos de otros puntos de la geografía nacional.

En concreto, Blanca destaca la solidaridad y el apoyo que reciben de las hermandades del Rocío, “la corona de amor”. “Todas ellas se unieron con la coronación de la virgen y el proyecto de esa coronación es Planta Zero”, cuenta. También son responsables de la iniciativa que se ha celebrado en Torre Sevilla, que nació de la propuesta de la hermandad de Valverde del Camino, municipio de la provincia de Huelva de donde es natural Pablo Adame.

“Este récord es la culminación de meses de entrenamiento y una prueba más de que, con esfuerzo y determinación, podemos hacer realidad nuestros sueños”, manifiesta el ciclista al concluir la prueba. “Llegar hasta aquí ha requerido un gran esfuerzo, pero sin lugar a dudas ha valido la pena contribuir a la difusión de la gran labor que están llevando a cabo desde Andex para mejorar las condiciones de vida de los niños y adolescentes con cáncer”, señala el deportista visiblemente cansado, pero satisfecho por haber alcanzado el objetivo. Andex lo tiene claro, la próxima hazaña tendrá la firma de Planta Zero.