El pago arancelario compensatorio provisional del 4,47% que EEUU ha impuesto a la aceituna negra importada desde España, por supuesta competencia desleal con su propia producción debido a las subvenciones que recibe, es un golpe dirigido exclusivamente a este país. No se ha planteado para otros que también se las venden (“no suponen una amenazan”, explican desde la patronal) pero sienta un precedente para otras variedades de olivas y demás productos, y de otros países, sujetos a la Política Agraria Común (PAC) de la UE, que cumple la normativa de la Organización Mundial de Comercio (OMC).
De momento es la aceituna negra, porque esta guerra la comenzaron las dos grandes productoras de California contra la competencia que les hace España con esta variedad, y la principal perjudicada, Andalucía, por cuanto que es líder en su producción. He aquí unas cifras para entender el impacto de la medida.
¿Cuánta aceituna de mesa se cultiva en España?
España cuenta con 2.623.156 hectáreas de olivar, de las que 152.345 (5,81%) se dedican a la aceituna de mesa. Estas últimas se concentran principalmente en Andalucía y Extremadura, que cuentan con un 83,86 % y un 13,49 % del total, respectivamente. Es decir, el 97,35% de los cultivos de aceituna de mesa se dan en Andalucía y Extremadura y un tercio son para la variedad negra. Son datos de la encuesta sobre superficies y rendimientos de cultivos de 2016 (Esyrce). El Consejo Oleícola Internacional (COI), por su parte, cifra el olivar en España en unos 850 millones de árboles, que ocupan una superficie de más de 10 millones de hectáreas. De éstas, más de un millón se dedica a la producción de aceitunas de mesa.
¿Qué país es el mayor productor?
España es el mayor productor de aceituna de mesa con 529.000 toneladas, lo que supone el 21% total mundial, según el Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (Mapama). El 30% de esas aceitunas de mesa son de la variedad negra. Sólo en Andalucía, en la última campaña, 2015-2016, la producción de aceituna de mesa fue de 463.000 toneladas, lo que supone el 77% del total nacional, según datos de la Asociación Española de Exportadores e Industriales de Aceituna de Mesa (Asemesa).
¿Cuánta aceituna negra exporta España?
En los últimos años, la variedad negra es un producto de enorme proyección, alcanzando el 36% del volumen total de exportaciones de aceitunas de mesa desde España a EEUU (32.000 toneladas en 2016), y con un valor de 70 millones de euros. El 74% procedente de Andalucía. Hay que recordar que España es el primer exportador mundial (acapara el 30% del comercio), destinándose a ese fin, como media en los últimos seis años, el 68% de la producción. Les siguen, a mucha distancia, países como Egipto, Turquía, Argelia, Grecia, Siria y Marruecos.
¿Cuánto empleo y jornales supone?
En una campaña media se vienen generando unos tres millones de jornales, sólo en el olivar de mesa. El sector en Andalucía cuenta con más de 200 entamadoras (empresas que se dedican al aderezo de aceitunas de mesa), el 54% del total nacional, y más de 100 envasadoras, que dan empleo directo a más de 8.500 personas, según datos de la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural. Las 78 cooperativas existentes en Andalucía producen el 55% del total, con una facturación de 350 millones de euros al año aproximadamente. Las empresas de aceituna de mesa explican que en las cooperativas donde el tanto por ciento de su producción exportada es muy alto (el caso de Agrosevilla que exporta a EEUU el 20%), tendría consecuencias en el empleo.
¿Cuáles podrían ser las pérdidas con los aranceles?
De momento se han hecho efectivas unas primeras medidas preliminares contra las subvenciones de la UE que se traducen en un arancel que se debe pagar en la aduana desde la semana que viene. En enero se resolverán las medidas contra el supuesto dumping o acusación de rebajar los precios por debajo de lo debido. Si se hacen definitivos los dos paquetes de medidas, por cinco años prorrogables a otros tantos, podría suponer el cierre del mercado, y ya se estiman las pérdidas en 350 ó 700 millones de euros en el peor de los casos. La cifra sale de multiplicar lo que venden por año en estos momentos en EEUU.
¿Cuánto se está gastando el sector en su defensa?
De momento, la defensa del sector se está moviendo en dos vertientes: la administrativa y la jurídica. En el primer caso, las diferentes administraciones implicadas aseguran estar trabajando en la elaboración de informes y en la contestación de preguntas formuladas desde EEUU. De hecho, el consejero de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural de Andalucía, Rodrigo Sánchez Haro, habla de la necesidad de rescatar documentación incluso de los años 90. La otra vertiente es la jurídica donde un equipo de abogados y economistas en España y otro en EEUU está trabajando. Esta defensa, calculan las empresas, que les va a costar un total de cinco millones de euros de junio a junio. El secretario general de Asemesa, Antonio Mora, dice que esperan algún tipo de ayuda en este sentido cuando todo termine.
¿Qué otras consecuencias puede tener este frente?
En cuanto que se está cuestionando la política de subvenciones de la UE, puede afectar en el futuro a otros productos, en caso de que haya otros sectores en EEUU, como ha hecho el de la aceituna de mesa en California, que se quejen de la competencia. Lo que más llama la atención a las autoridades en España es que sólo se haya puesto el foco en el producto que llega desde este país, por cuanto que es el más importante a nivel de exportaciones, y no en otros que también venden aceituna negra en EEUU. Como tampoco se ha cuestionado, de momento, la competencia que suponen otro tipo de productos sujetos a fondos de la PAC.