Francesco Arcuri, la expareja de Juana Rivas, ha vuelto con sus hijos a Italia, donde reside en la isla de Caloforte, dando cumplimiento a la sentencia civil que ordena la restitución de los menores. El hombre ha salido de territorio nacional español tras darse por completados los trámites judiciales que quedaban pendientes en la vía penal, han informado a Europa Press fuentes del caso.
En ese ámbito está siendo investigada Juana Rivas por presunto delito de sustracción de menores y desobediencia a la autoridad judicial tras estar casi un mes ilocalizable con los niños, de once y tres años. Algo que motivó la denuncia de Arcuri y el establecimiento de una orden de detención. Lo hizo para no acatar la orden judicial que le obligaba a devolverlos al progenitor, condenado en 2009 por un delito de lesiones.
Finalmente, el pasado lunes entregó a los niños a la Guardia Civil ante el ultimátum impuesto por el Juzgado de Instrucción nº2 de Granada, que instruye la causa penal y que fijó ese día a las 17.00 horas la entrega en un Punto de Encuentro Familiar de la ciudad. Un juez de guardia había dictado libertad provisional para la mujer después de que se presentara en el juzgado hace algo más de una semana por primera vez desde el 26 de julio.
Ahora es en los tribunales italianos donde se tendrán que dirimir las medidas paternofiliales como la custodia o el régimen de visitas. Un proceso que tendrá la vista previa el próximo 31 de octubre. La defensa de Juana no ha especificado este jueves, a preguntas de los medios, si existen negociaciones entre las partes a este respecto. Sí ha indicado que están en contacto con los abogados italianos para abordar el caso en este país europeo.
Lo ha hecho después de informar de que los padres, la hermana y el hermano de la mujer se han acogido a su derecho a no declarar ante la jueza, que les ha imputado por presunta participación en el delito de sustracción de menores por el que se investiga a Juana. La citación judicial se producía un día después de la de las asesoras del Centro de la Mujer de Maracena, Francisca Granados y Teresa Sanz, que negaron toda colaboración o incitación al delito.
Denuncia por violencia de género
Italia también deberá investigar la denuncia por violencia machista que interpuso Juana Rivas en España en julio de 2016. Fue este mes de agosto remitida a los tribunales italianos con más de un año de retraso, ya que el Estatuto de la Víctima del Delito obliga a hacerlo “inmediatamente” cuando los tribunales no tienen jurisdicción, como es el caso. La denuncia ha sido ampliada, también este agosto, y ha sido tramitada por la juez para que la Fiscalía se pronuncie.
Según informa Europa Press, la comisión mixta para el cumplimiento del Convenio de La Haya, en la que está el Ministerio de Justicia español, valorará en su momento la denuncia por violencia machista, una vez los niños estén instalados en su residencia habitual en la isla italiana de Carloforte, donde el padre regenta un establecimiento de hospedaje.