Granada se queda sin tren a Barcelona (de momento)

Sigue la encrucijada ferroviaria de Granada. Por un lado, porque el presidente de Renfe, Isaías Táboas, ha descartado que el tren-hotel que unía la capital andaluza con Barcelona regrese; y por otro, porque la máxima dirigente de ADIF, Isabel Pardo de Vera, admite ahora que las pruebas para la llegada de la Alta Velocidad, prevista para junio, se alargarán. Eso sí, en este caso no se cierra la puerta a que el plazo de puesta en marcha del servicio acabe siendo en el primer mes del verano.

Aunque en los últimos meses el impulso recibido por el sector del tren en la provincia de Granada indicaba una inercia positiva, las últimas noticias han frenado el entusiasmo. El presidente de Renfe, Isaías Táboas, compareció este lunes en el Congreso de los Diputados para acabar con las ilusiones puestas de un posible regreso inmediato del tren que unía Granada con Barcelona. El dirigente descarta esa posibilidad y emplaza a esperar a que la Alta Velocidad llegue a la ciudad antes de estudiar que Granada cuente con esa nueva conexión.

Sin solución de continuidad

El anuncio por parte de Renfe deja en papel mojado el compromiso adquirido por el propio Congreso a finales de 2018 de exigir el regreso del tren-hotel de Granada con Barcelona que operó hasta el verano de 2015. Los diputados aprobaron una Proposición No de Ley (PNL) impulsada por Unidos Podemos para solicitar el regreso de este ferrocarril aprovechando que el Ministerio de Fomento acababa de reabrir la línea que une la capital granadina con Madrid a través de trenes Talgo.

Sin embargo, la conexión ferroviaria con Barcelona tendrá que esperar hasta nueva orden. Hasta 2015, Granada y Barcelona tenían una ruta diaria que unía ambas ciudades con un tren-hotel cuyo servicio se detuvo aprovechando las obras de las vías a su paso por Castellón y porque, según informan fuentes consultadas, el viaje no era rentable económicamente para Renfe.

Táboas asegura que lo que se está “estudiando” actualmente es que Granada conecte con Barcelona en el futuro pero a través de un AVE. Es decir, un futuro que queda supeditado a que la Alta Velocidad llegue cuando el Ministerio de Fomento acabe unas pruebas que se han prolongado más tiempo aún, según ha confirmado este martes la propia presidenta de ADIF, Isabel Pardo de Vera. De modo que lo que pretende Renfe es que algún día ambas ciudades se conecten por un AVE diurno que utilice la vía que une Granada con Antequera, en sentido contrario al recorrido natural que debiera tener hacia el Levante.

El AVE y el retraso

Con todo, la llegada de la Alta Velocidad a la ciudad de la Alhambra ha quedado en entredicho después de la visita de Pardo de Vera a la capital andaluza donde se ha reunido con el alcalde, Francisco Cuenca (PSOE), y el presidente de la Diputación, José Entrena (PSOE). En la reunión que han mantenido, la presidenta de ADIF le ha trasladado a ambos mandatarios que las pruebas previas a que llegue el AVE hasta Granada se alargan. Durarán mes y medio más.

No obstante, Pardo de Vera confía en que, pese al enésimo retraso que sufre la infraestructura, se cumplan los plazos previstos y dados en septiembre por el ministro de Fomento, José Luis Ábalos. En aquel momento indicó que el AVE llegaría a Granada a principios de verano, es decir, en junio, y el compromiso que mantiene la presidenta de ADIF es mantener esa fecha. Algo que las plataformas en defensa del tren no terminan de creerse ni ahora ni antes, tal y como han señalado a este medio.

Un transporte deficiente

Mientras se descarta la opción del tren-hotel a Barcelona y el AVE vuelve a ponerse en duda, Granada sigue sumida en un sistema de transporte ferroviario deficiente, según señalan expertos y plataformas. Actualmente solo hay en servicio dos viajes diarios con destino y final en Granada. El que conecta la ciudad nazarí con Almería -un trayecto que nunca se ha interrumpido- y el que hace lo propio con Madrid y que se retomó en noviembre de 2018 después de casi cuatro años sin ningún ferrocarril hasta la capital de España ni hacia ninguna otra zona del país.

Lo que queda, para quienes quieren viajar por tren a otros lugares de la península, es utilizar el modelo mixto que aún mantiene Renfe. Consiste en un viaje, con precio promocional, en autobús desde Granada hacia Antequera para desde allí coger un AVE que lleve al destino elegido. Entre ellos, Barcelona, Valencia o Zaragoza. Esas son las únicas opciones con las que cuentan los granadinos para hacer un trayecto en tren desde su ciudad. Porque, de momento, Granada para subirse al tren de la Alta Velocidad aún tendrá que esperar.