Sebastián Pérez deja el Partido Popular. Tras 35 años como afiliado a los populares, en los que ha llegado a ser presidente provincial durante más de una década, senador y mandatario de la Diputación de Granada, ha comparecido para anunciarlo este miércoles y abrir la puerta a una posible moción de censura en el Ayuntamiento granadino que daría la alcaldía al socialista Francisco Cuenca. Porque se marcha pero mantiene su acta como concejal. Tajante, quiere que el actual regidor, Luis Salvador (Ciudadanos), deje de serlo por haberle traicionado y pide al PP, con el que gobierna en coalición, que lo haga posible.
El ya exmilitante popular ha sido muy duro durante su intervención y ha cargado especialmente contra el alcalde al que ha llamado “mentiroso”. Sebastián Pérez relata que el edil le traicionó hace dos años cuando ambos pactaron que en 2021 habría una alternancia entre Cs y PP en el sillón de alcalde. Un cambio de alcalde conocido como “2+2” del que Luis Salvador se borró, según Pérez. Por eso y por sentir que la dirección regional del PP-A de Juan Manuel Moreno Bonilla y Elías Bendodo le ha arrinconado en beneficio de Salvador, dice que va a trabajar para que haya un cambio de alcalde. Un escenario en el que pide al PP que fuerce la salida de Luis Salvador y que, si eso no sucede, apoyaría al líder del PSOE de Granada, Francisco Cuenca, que fue quien ganó las elecciones municipales de mayo de 2019 logrando 10 concejales por los 7 del PP y los 4 de Ciudadanos.
Este terremoto político puede interpretarse de diferentes formas. Por un lado, quienes apuntan a que esta opa hostil utiliza a los socialistas como moneda de cambio para que Ciudadanos desaparezca de la alcaldía, pero una carta arriesgada para el PSOE; y quienes sostienen que, de verdad, es un movimiento de Pérez para que el Partido Popular pueda retomar el Gobierno de la ciudad de Granada. Cualquiera de las dos opciones llegaría con las cartas encima de la mesa, porque Sebastián Pérez no se ha guardado nada.
Su comparecencia ante los medios ha durado cerca de dos horas y se ha celebrado en el mismo lugar en el que negoció los apoyos de Ciudadanos para convertirse en alcalde. Sobre aquella cita, Sebastián Pérez ha asegurado que fue una farsa orquestada por Luis Salvador y Elías Bendodo el 4 de junio de 2019, que ya habían tomado la decisión de que la alcaldía fuese a parar a manos del edil naranja. Un hecho que se produciría en el pleno de investidura once días después, el 15 de junio, cuando Ciudadanos logró el bastón de mando con solo cuatro concejales y el apoyo del PP y Vox : “Yo no lo supe hasta la misma mañana de la investidura”.
El exmandatario popular asegura que el acuerdo entre populares y naranjas para gobernar en coalición se firmó a espaldas de él y de los seis concejales del PP en el Ayuntamiento de Granada. “Se nos dejó solos, confiando y abusando de nuestra buena fe. Se conculcó la voluntad de los granadinos”. Dice que él se estrechó la mano con Luis Salvador para que hubiera alternancia a los dos años y que hasta el portavoz municipal de los populares, César Díaz, y la secretaria general del PP-A, Loles López, reconocieron que ese acuerdo se había sellado y que debía cumplirse.
Sebastián Pérez relata un episodio en Madrid en el que Luis Salvador, del que dice que es una persona que “no es de fiar”, fue invitado a una reunión en la sede del Partido Popular nacional y que ante la presencia del secretario general del partido, Teodoro García Egea, el alcalde les dijo que había mentido en el pacto del “2+2” para asegurarse la alcaldía. Un momento crucial que ha marcado el devenir de los acontecimientos en los últimos meses. Cuenta que, tras aquello, la dirección nacional le dio permiso para retirar al PP del gobierno y que lo intentó, pero se encontró sin apoyos suficientes.
“Si la dirección regional no quería que siguiera al frente del partido, que me lo hubieran dicho”, dice señalando a Juan Manuel Moreno Bonilla y a Elías Bendodo. A ellos les culpa de su decisión de dejar la presidencia granadina de los populares y de que su rastro tras más de 15 años haya sido “borrado”. Añade que ambos mantienen a Luis Salvador en la alcaldía de Granada cuando es un político al que “no quiere nadie y nadie ha votado”. Según Pérez, “no debe triunfar ni el trilerismo, ni el arribismo”.
Aunque le han ofrecido ser senador de nuevo, justifica su decisión de dejar el PP, pero mantener el acta como concejal alegando que va a seguir “peleando por Granada”. Pérez cuenta que hay miedo entre sus concejales a salir y dar la cara porque temen la reacción de la dirección regional del partido. Sin embargo, les ha pedido que den un paso al frente y dimitan para forzar a que Luis Salvador tenga que dejar de ser alcalde. Una situación que descartan fuentes populares consultadas.
Las posibilidades que hay encima de la mesa pasan porque el Partido Popular fuerce la marcha de Salvador, que los ediles dejen su puesto en el equipo de Gobierno o que el PSOE presente una moción de censura que apoyaría Sebastián Pérez. Sin embargo, ninguna de las tres vías es fácil. En el primer caso, desde Sevilla no quieren que nada se mueva y menos poder provocar inestabilidad de cara a unas elecciones andaluzas anticipadas, algo que sí ve con buenos ojos la dirección nacional. Con respecto a las dimisiones, parecen poco probables porque Sebastián Pérez apenas tenía apoyos dentro de su formación municipal; y sobre la moción de censura, hay que hacer números porque el riesgo de perder una nueva moción de censura por parte de los socialistas sería un golpe político.
El PSOE, que la descartaba abiertamente, ya no se cierra a la posibilidad de que Francisco Cuenca pueda volver a ser el alcalde de Granada, según fuentes del partido. Sin embargo, Podemos-IU podría ser un escollo para esa operación porque no quieren aparecer en la misma fotografía que Sebastián Pérez. De hecho, su portavoz, Antonio Cambril, dice que la ciudad no está para debatir esos asuntos y sí lo social y lo que preocupa de verdad a los ciudadanos. La moción necesita de 14 firmas y para ello tendrían que apoyarla los 10 concejales socialistas, los 3 de la coalición de izquierdas y a ellos se les sumaría el voto de Sebastián Pérez que daría la mayoría absoluta necesaria.
En cualquier caso, Pérez ha dejado claro que si la próxima rueda de prensa la da en el registro del Ayuntamiento de Granada, no habrá marcha atrás y habrá moción de censura contra Luis Salvador y a favor del PSOE. Dice que no quiere ser cómplice del “chalaneo y el postureo”. Tajante, el ya exmilitante popular considera que por encima de él y de las siglas, “está Granada”. “La dignidad de Sebastián Pérez ni se compra ni se vende. Los granadinos no quieren lo que hay y espero que el PP tenga el sentido común para hacer lo que tenga que hacer”.
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