El 27 de junio dejó en Málaga una estampa similar a la del 21 de diciembre: victoria del PP e idéntico reparto de escaños. El PP envía a Madrid cuatro de los once diputados asignados a la provincia, por tres del PSOE, dos de Unidos Podemos y dos de Ciudadanos. Tampoco la movilización varió en exceso: 0,4 puntos porcentuales menos. Nada cambia y, sin embargo, algo pasó: hubo un desplazamiento de voto hacia la derecha y el PP ganó 30.000 sufragios (el 34,42% de los votos, por el 28,94% de diciembre), mientras que la coalición Unidos Podemos se dejó 45.000, más de cinco puntos porcentuales. El PSOE perdió 8.000 votos (pese a mejorar su porcentaje en una décima: efectos de la abstención) y Ciudadanos, 12.000, bajando 0,8 puntos porcentuales.
La victoria de la derecha se fraguó en la costa. De Manilva (plaza tradicional de la izquierda: nunca ha gobernado el PP) a Nerja, todos los municipios de la Costa del Sol dieron su apoyo mayoritario al PP, que sacó 10 puntos porcentuales de ventaja sobre el PSOE en Marbella, 17 en Estepona, 14 en Benalmádena, 20 en Fuengirola, siete en Mijas, 16 en Torremolinos, nueve en Málaga capital y nueve en Vélez-Málaga. Son los municipios más poblados de la provincia. El PP logró 37 victorias municipales (diez más que en diciembre), el PSOE apenas resistió en los pequeños pueblos del interior y Unidos Podemos se impuso en cinco localidades: Arriate, Istán, Casabermeja, Humilladero y Teba.
Los populares mejoraron sus resultados en más de 30.000 sufragios, mientras que los socialistas se dejaron 8.000 votos, así que el PP sacó casi 55.000 votos al segundo partido, el PSOE. A Elías Bendodo, presidente provincial del partido, se le vio especialmente deseoso de reivindicar la victoria del PP en Andalucía, para la que ha sido clave el triunfo en Málaga: “Ha habido sorpasso, pero se ha producido en Andalucía. Ha sido un surpasso”. El PP es el único partido que crece en Málaga y Bendodo abundó en la idea de que es la provincia que más votos nuevos aporta a la victoria del PP en Andalucía.
Miguel Ángel Heredia, secretario general del PSOE de Málaga y cabeza de lista al Congreso por la provincia, dedicó sus primeras reflexiones a valorar la actitud de Podemos en la investidura fallida post 20-D. “Por la intransigencia de la izquierda radical y sus líneas rojas, la mayoría de derechas ha reforzado su fuerza en el Congreso de los Diputados”, dijo para comenzar, antes de reformular la idea: “Estamos en esta situación porque Pablo Manuel Iglesias votó de la mano del PP y forzó nuevas elecciones”. “Quiero comenzar así porque ese es el resumen de estas elecciones”, explicó. Alberto Montero, número uno de Unidos Podemos, encontró explicación a la pérdida de 45.000 votos en la “estrategia del miedo”.
Cambio de caras y mejor reparto proporcional
Cambio de caras y mejor reparto proporcionalLa repetición de elecciones sirvió en Málaga para un cambio de caras. Carolina España sustituyó a José María García Urbano como número uno del PP. Fue la candidata de la necesidad, por la espantada del anterior cabeza de lista y la renuncia a sustituirle del alcalde de Málaga, Francisco de la Torre. Pese a su escasa proyección mediática, España ha mejorado notablemente los resultados del PP en diciembre. La acompañarán en el Congreso una histórica (Celia Villalobos), un exsenador (Avelino Barrionuevo) y un diputado (Ángel González). En el PSOE la novedad la representa Begoña Tundidor, que acompañará a Miguel Ángel Heredia y José Andrés Torres Mora.
IU, que se quedó sin diputado por Málaga en la convocatoria de diciembre, estará representado ahora por Eva García Sempere, número dos en la lista de Unidos Podemos por detrás de Alberto Montero. Y en Ciudadanos Guillermo Díaz sustituye como número dos a José Calle. Acompañará a Irene Rivera, que en julio dejó su recién estrenado escaño en el Parlamento andaluz para presentarse a las elecciones generales.
El PP también ha obtenido tres de los cuatro senadores asignados a la provincia, que serán Ángeles Muñoz (exalcaldesa de Marbella), Joaquín Ramírez (expresidente del PP de Málaga) y Manuel Marmolejo, condenado por acoso laboral en el ejercicio de sus funciones cuando era gerente del Consorcio de Bomberos. Antonio Morales (exfiscal jefe de la Audiencia Provincial de Málaga) será senador por el PSOE.
El desplazamiento de votantes hacia la derecha no tuvo reflejo en el reparto de escaños porque la aritmética deja esta vez un resultado más aproximado a una distribución proporcional de los votos. Unidos Podemos necesitó 69.817 sufragios para sumar cada uno de sus dos escaños; Ciudadanos, 60.400. Entre medias, PP (63.819 votos por cada uno de sus cuatro escaños) y PSOE (66.932). En diciembre de 2015 IU se quedó sin diputado pese a obtener 52.000 votos; en esta ocasión García Sempere representará a Unidos Podemos en el Congreso.