Nature Call Iniatives, la empresa detrás del proyecto de complejo turístico, deportivo y de ocio que se situaría sobre el acuífero que abastece a la población y las huertas de Coín (Málaga), cree que contribuirá a reforzar la “conciencia y el respeto por el medio ambiente”. Sus promotores la están presentando como una iniciativa sostenible vinculada al deporte, y muestran una conciencia ambiental tan acusada que la sostenibilidad parece su principal propósito. El objetivo del centro sería “hacer trascender a los futuros usuarios ofreciendo una experiencia única de vida saludable y superación personal”.
Trascendence, que así se llama, pretende convertir a Los Llanos de Matagallar, un paraje de Coín a 25 kilómetros de Málaga capital, en referencia de los deportes extremos, previa inversión de 267 millones de euros. Sus promotores son Ard-Id Investment & Development, S.L., el holding familiar de los hijos de Mariola Martínez-Bordiú, la segunda nieta de Francisco Franco, y Rafael Ardid, nieto de un general republicano, una familia históricamente dedicada al mercado inmobiliario y hotelero de lujo.
Jaime y Javier Ardid Martínez-Bordiú están reuniéndose con vecinos, empresarios y colectivos de Coín para convencerlos de las bondades del proyecto, al que revisten de una pátina de sostenibilidad ambiental aparentemente alejada del interés especulativo e inmobiliario.
“No existe ningún otro centro similar en España”, explican en un amplio dossier remitido a los medios después de semanas de silencio público, en las que ha cristalizado una fuerte oposición al proyecto, tanto en el Pleno municipal (los cinco grupos se mostraron en contra, incluyendo el equipo de gobierno -PP-) como en una Mesa del Agua integrada por vecinos y colectivos.
Entre estos existe el temor de que los alojamientos e instalaciones sobre la zona de captación del acuífero pongan en peligro la masa de agua (ya muy reducida respecto a lo que fue) y la potabilidad en caso de infiltraciones. Hace 15 años, la oposición vecinal tumbó un proyecto de mil viviendas y un campo de golf por estos motivos. La Junta de Andalucía ha declarado que el proyecto es “de interés estratégico” y lo ha incluido en su aceleradora, pero aún debe obtener todas las autorizaciones ambientales y superar varios trámites urbanísticos.
Una piscina de olas homologada para el Mundial de surf
El documento de la promotora, que no tiene valor legal, sirve de carta de presentación de una iniciativa cuyo contenido solo se conocía hasta ahora a través de la referencia indirecta del BOJA que lo declara de “interés estratégico”.
Su objetivo es que Los Llanos cuente con 510 alojamientos (entre “lodges” y “eco-villas”) e instalaciones para la práctica de 35 deportes (incluyendo una piscina de olas que sería la única del mundo homologada para un Mundial de surf), así como espacios de restauración y entretenimiento. De la parcela de 1.270.000 metros cuadrados ocuparían unos 260.000, de los cuales 106.000 estaría destinado a edificación: parte iría sobreelevada para mantener la permeabilidad del terreno y el resto serían balsas de agua impermeables que verterían el excedente al cauce del manantial, según Grupo ARD.
Dicen sus promotores que la zona se convertiría en un “espacio de convivencia” con el deporte, la salud, y la naturaleza como pilares y “la sostenibilidad y el impacto positivo en el entorno social y económico de la zona como premisas”, y aseguran que pretenden innovar el plan parcial vigente para limitar la edificabilidad y evitar la “futura especulación inmobiliaria”. Prometen regirse por “los principios y certificaciones de sostenibilidad más exigentes”, e instalar un “centro de investigación y desarrollo de soluciones medio ambientales, enfocadas en la eficiencia hídrica, así como de protección de la flora y la fauna autóctona”. También habría una biofactoría para generar biogás y compost.
El proyecto no convence a sus opositores
El dossier de Trascendence y las reuniones buscan convencer a los vecinos y opositores al proyecto. En paralelo, los promotores han contactado ya con empresarios locales para incorporarlos al proyecto. Por ahora, los nuevos detalles ofrecidos por la promotora no están venciendo las resistencias.
“No hay nada distinto. Ya sabíamos que venderían sostenibilidad, y que dicen que van a construir menos. Pero ni más, ni menos: allí no debería construir nada”, advierte Salvador Rojas, portavoz del PSOE: “La preocupación es la misma, porque aunque construyan en elevado necesitarán saneamientos y hay riesgo para el acuífero”.
“Es un dossier comercial sin datos técnicos”, dice Juan Marmolejo, de la Mesa del Agua. Lo que les cuentan les parece incongruente. En un encuentro celebrado este lunes, les dijeron que el acuífero tiene un excedente de 62 litros por segundo que se vierte a la cuenca del Guadalhorce. Pero Marmolejo no sabe dónde y recuerda que un informe del catedrático Bartolomé Andreu advertía de que el acuífero era deficitario ya en 1996. “Ahora los regantes no tienen nada de agua superficial, y el pozo este año está agotado: saca 8 litros por segundo, en lugar de 25 como debía”. Por eso insiste: “Estamos en contra del proyecto ahí: cualquier error, ahora o en el futuro, pone en riesgo el acuífero, la población y sus huertas”.
Las promesas de la promotora
Según el documento, las viviendas se construirán con criterios de máxima eficiencia energética, usando materiales naturales o reciclados, sobre pilares de madera para facilitar la infiltración del agua y canalizaciones superficiales.
El agua es el aspecto más sensible. Trascendence prevé una estación depuradora de aguas residuales y sistemas de condensación de humedad ambiental. “Todas las láminas de agua serán completamente impermeables para evitar pérdidas de agua por filtraciones y garantizar la protección del acuífero”, subrayan. Dicen que pretenden modificar el plan parcial para reducir el consumo de agua autorizado en la parcela. Necesitarían 171.402 metros cúbicos, una quinta parte de lo que requerirían las 1.000 viviendas, los dos hoteles y el campo de golf que actualmente autoriza el plan urbanístico municipal.
Todo esto generaría 750 empleos en la fase de construcción, y de 600 a 800 en la fase de explotación, según sus impulsores, que prometen constituir un “fondo de desarrollo” con el 0,5% de todos los ingresos que se generen para desarrollar iniciativas sociales y ambientales con asociaciones locales.
Los cuatro grupos de la oposición (PSOE, Vox, Unidas Podemos y Andalucía por Sí) llevaron mociones de oposición al Pleno del pasado 28 de septiembre, que fueron apoyadas incluso por el PP, que gobierna en solitario. IU ha anunciado incluso que llevará el asunto a instancias europeas. Sin embargo, el alcalde advirtió que no será fácil rechazar el proyecto, que se asienta en terreno privado y urbanizable sobre el que hasta ahora se prevén viviendas, dos hoteles y un campo de golf. El equipo de gobierno teme tener que afrontar reclamaciones millonarias si el proyecto se va al traste.