Un total de 25 municipios
de la provincia de Córdoba cuentan ya en el registro de sus ayuntamientos con
una propuesta de moción presentada en junio por el partido ecologista Equo para
que estas poblaciones se declaren libres de fracking y no permitan que en sus
términos se realice esta práctica de extracción de gas. Esta propuesta, ha sido recogida y votada en el Pleno del Ayuntamiento de Montoro este verano, que ha sido el primer municipio de la provincia cordobesa en declararse “libre de fracking”.
Los 25 municipios citados
se encuentran en las cuatro zonas sobre las que ya hay hechas sendas peticiones
a la Junta de Andalucía para realizar exploraciones sobre el terreno y ver así
la viabilidad de llevar a cabo prácticas de fracking, consistentes en perforar
el subsuelo en busca de hidrocarburos utilizando una técnica basada en
fracturar la roca con una potente inyección de agua, arena y otros componentes para
liberar el gas.
La primera de esas
cuatro zonas de la provincia de Córdoba comprende los municipios de Adamuz,
Cardeña, Obejo, Montoro, Villafranca, Córdoba, Villaviciosa, Villaharta,
Pozoblanco, Villanueva de Córdoba y Espiel. La segunda zona, también aguas arriba
del Guadalquivir desde la capital, suma las poblaciones de El Carpio, Pedro
Abad, Bujalance, Cañete de las Torres, Baena y Castro del Río.
Aguas abajo del
Guadalquivir a su paso por la capital, se encuentran afectados los
términos municipales de Córdoba, Almodóvar del Río, Guadalcázar, La Rambla, La
Carlota, La Victoria, Fernán Núñez, Montemayor y Espejo.
La suma total del
terreno afectado en Córdoba asciende a unas 250.000 hectáreas, todas ellas en
municipios aledaños a afluentes y al propio Guadalquivir, incluida la capital,
sobre las que existen solicitudes de exploración por parte de las empresas
RIPSA (Repsol Investigaciones Petrolíferas S.A.) y Oil&Gas Capital, según ha explicado a eldiario.es/andalucia
el portavoz de Equo en Córdoba, José Larios.
Uso de las competencias de los ayuntamientos
La presentación de
su moción en los distintos ayuntamientos y en la Diputación Provincial persigue
que estas poblaciones se adelanten a la resolución de la Junta de Andalucía
sobre las peticiones de las empresas –sobre lo que aún no hay respuesta de la
administración autonómica- y declaren
sus términos municipales libres de las prácticas de fracking.
Hay que tener en
cuenta que los ayuntamientos tienen competencias sobre obras en su suelo, por
lo que, más allá de que la administración autonómica otorgara el permiso a las
empresas de exploración del terreno, los municipios pueden paralizar el proceso
negándose, por ejemplo, a conceder las preceptivas licencias de obras y otros
permisos que obran entre sus poderes.
Por eso, desde
Equo, esperan que la moción presentada “u otra nueva que se redacte al respecto
en el mismo sentido“, sea recogida por los distintos grupos municipales para llevar el
fracking al debate municipal, como acaba de ocurrir en el caso de Montoro.
Municipios de Jaén, Sevilla y Cádiz ya se han declarado en contra
En el resto de
Andalucía, municipios del cauce del Guadalquivir en las provincias de Jaén,
Sevilla y Cádiz ya han tratado en sus ayuntamientos este asunto y se han
declarado “libres de fracking”, atando así las manos de las empresas perforadoras
que, en algún caso, ya había obtenido el permiso de investigación de la Junta de Andalucía.
Así, Villanueva del
Arzobispo, Torreperogil y Porcuna en Jaén, Camas y Guillena en Sevilla, o
Medina Sidonia y Puerto Real en la provincia de Cádiz, son poblaciones que en
los últimos meses se han declarado libres de fracking.
En otras
administraciones, cabe recordar que en el mes de mayo pasado, la
descoordinación y los distintos puntos de vista en las posiciones de Izquierda
Unida y PSOE sobre el fracking, propició que el Parlamento Andaluz no votara
una proposición no de ley para declarar a Andalucía como territorio libre de
esta práctica.
Izquierda Unida se
oponía frontalmente a esta técnica de fracturación hidráulica mientras que el PSOE era partidario de
pedir una moratoria para evaluar las consecuencias reales del fracking. De hecho, sólo se llegó a aprobar que se instara a la Junta a no
conceder nuevas autorizaciones para estas prácticas y a realizar los
cambios en las normas para que así sea.
Permisos de la Junta y el Gobierno
Por parte del
Gobierno central, cabe recordar que en abril, el Consejo de Ministros
aprobó el Anteproyecto de Ley sobre Evaluación Ambiental, en el que expresamente
se regula la fragmentación hidráulica o fracking, utilizada para extraer gas atrapado entre
las rocas, como una de las actividades que necesita de un estudio de impacto
ambiental previo.
En el
marco internacional, países europeos como Francia mantienen una moratoria que
impide su aplicación hasta comprobar sus posibles consecuencias nocivas en el
entorno. Mientras, en Estados Unidos, donde se practica ampliamente desde hace
años el fracking, se han registrado problemas de contaminación de acuíferos y emisión de
gases potencialmente nocivos para la salud.