Susana Díaz suma calificativos a la situación que vive como única candidata a la Presidencia de la Junta, tres veces rechazada por el Parlamento andaluz constituido tras las elecciones del 22 de marzo. A “ridículo” o “sinsentido”, que ha venido comentando en las úlltimas semanas y también ha utilizado en la entrevista de este viernes en la Cadena Ser, le ha añadido “esperpento”. Cada vez que se vota 'no' a su investidura, “los que pierden son los andaluces”, quienes ven como un “esperpento” que Andalucía no tenga un gobierno.
Además, la presidenta de la Junta de Andalucía en funciones y secretaria general del PSOE-A ha insistido en que los partidos que están rechazando su investidura como presidenta en la décima legislatura, cuando vean que están cerca de las urnas y piensen que su “descalabro puede ser mayor que el del 22 de marzo”, quizá “se planteen otra cosa”.
Díaz ha señalado, en referencia a Podemos o Ciudadanos, que los que defendían que era necesario acabar con el bipartidismo imperfecto que teníamos en España y que era buena la pluralidad, ahora hacen “seguidismo” PP, boicoteando y bloqueando la constitución del Gobierno andaluz, lo que no es el camino en unos momentos en los que este país el diálogo va a ser fundamental en todas las instituciones. Entiende que haya alternativas, pero no que se boicotee y se haga obstrucción a que las instituciones funcionen, ha comentado.
La presidenta en funciones ha advertido además, en relación con las negociaciones que su partido ha llevado con el resto de fuerzas, que el “trágala” que plantea por parte de quienes han perdido las elecciones no es el camino. Respecto a si prevé una votación de investidura más ante de las elecciones del día 24, ha indicado que irá al Parlamento cuando éste lo determine, si bien ha expresado que empieza “a rozar ridículo y el sinsentido ese no por el no, porque no me va bien”, insistiendo en que no va a permitir que Andalucía sea “moneda de cambio o de trueque de nadie” de cara al día 24, y ha señalado que es evidente que algunos esperan cómo queda el panorama ese día en España.
Díaz ha defendido que desde el primer día está siendo generosa porque quería un gran consenso parlamentario y social, y, sin embargo, esta semana ha sido un continuo llamamiento a que nos esperemos al 24 de mayo. Asimismo, ha señalado que algunos aprovechan el “subterfugio” que da la Ley Electoral de Andalucía para seguir bloqueando permanentemente la conformación de un gobierno, y ha señalado que, en absoluto, se arrepiente del adelanto electoral en Andalucía.
Sobre si prevé su investidura tras el 24 de mayo o podrían convocarse elecciones, ha expresado que no lo sabe y ha señalado que la responsabilidad dice que tenía que ser ya presidenta y tener un gobierno formado. Ha indicado que si algunos quieren seguir “bloqueando”, tendremos que “ir a las elecciones”.
Preguntada sobre si ha hablado con líderes nacionales de partidos, como el de Ciudadanos, Albert Rivera, ha señalado que ha hablado con ellos porque ellos desde el primer día han hablado de Andalucía. A su juicio, es normal que cuando algunos han hablado diariamente de Andalucía, también escuchen lo que piensa la presidenta de la Junta en funciones y candidata. Díaz también ha querido dejar claro también que ella ha hablado con los dirigentes regionales de todos los partidos.
Aznalcóllar, “una pelea entre empresas”
En relación con el asunto de la mina de Aznalcóllar (Sevilla), no convertir en un “caso de corrupción” lo que es una “pelea entre dos empresas por una adjudicación de un concurso” y ha comentado que es evidente que algunos lo quieren hacer para “generar ruido en la campaña electoral”.
Díaz ha manifestado que conoció el auto judicial a través de un medio de comunicación, algo que no es la primera vez que ocurre ni será la última. Ha indicado que los servicios jurídicos de Junta se personaron en el juzgado para acceder al citado auto y ella, lo primero que mandó es la paralización de los efectos de la adjudicación, porque “si una juez tiene sospecha, hay que paralizar”.
No obstante, ha agregado que el informe de los letrados de la Junta dice con claridad que se ha actuado “conforme a derecho” y todo el procedimiento ha estado visado por trece funcionarios, que son los que han participado y no políticos.
“Me basta que haya una sospecha por parte de una jueza para que se pare y pido rapidez y que se aclare”, ha sentenciado Susana Díaz, quien ha agregado que no puede permitir que los ciudadanos puedan tener “recelo” alguno de ninguna decisión de un gobierno, pero “tiene que haber rapidez porque hay miles de trabajadores que llevan 17 años esperando en unas de las zonas más deprimidas de Andalucía”.
Susana Díaz ha defendido que ha sido uno de los procesos más transparentes que se conocen en un concurso de adjudicación y solo han participado trece funcionarios y no los políticos. La presidenta andaluza ha indicado que le hubiera gustado ver a muchos comportándose como se ha comportado la Junta de Andalucía en el momento en que ha surgido una sospecha por parte de una juez.
También en referencia al ámbito judicial, Díaz ha sido preguntada por una información que publica el diario ABC este viernes en la que se indica que ha contactado con el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes, para “interesarse por la decisión que tomará este órgano de gobierno de los jueces en torno a la continuidad o no” de Alaya en el juzgado que investiga los ERE.
“Esa son las mentiras de quienes son servidores de intereses que no se comprenden, porque no son confesables”, ha indicado Díaz, quien ha señalado que está acostumbrada a que la ataquen, pero le parece “grave que se ponga en cuestión a la máxima autoridad judicial del Estado”.Ha indicado que ha hablado con el presidente del CGPJ como han hecho todos los presidentes autonómicos, dentro de una relación “institucional y cordial”.
Díaz ha querido dejar claro que tiene más respeto por la justicia en este país y por la máxima autoridad del poder judicial que la “que tienen quienes escriben ese tipo de cosas, que al final lo que están cuestionando es la independencia y las instituciones máximas y así nos va como nos va en este país”. Ha señalado que se le hace “mucho más daño a una institución que debería estar al margen de las cuitas políticas”.