Televisiones públicas locales: las enemigas del pluralismo político

Tres años después de que se produjera el apagón analógico, la situación de la televisión pública local en Andalucía es la de un modelo en el que se enfrentan, por un lado, la defensa de unos puestos de trabajo y un servicio al ciudadano, y por otro, pérdidas millonarias y el afán por ejercer un control político sobre este instrumento. La realidad es que de las 37 operativas actualmente en la comunidad autónoma, 11 emiten con señal analógica -pese a que el plazo para el salto a la TDT acabó en marzo de 2010- y otras 10 tienen su sede en municipios que no son cabeza de demarcación sin haber llegado a acuerdos con el resto poblaciones implicadas.

Pero si algo está lastrando este modelo es la falta de pluralismo político, como destaca el Consejo Audiovisual de Andalucía (CAA) en el informe correspondiente a 2012, que acaba de darse a conocer. La infrarrepresentación de los partidos que están fuera del gobierno local disminuye sus posibilidades de expresar ideas y opiniones, pese a tratarse de emisoras pagadas con dinero público.

De hecho, según este informe, casi ninguna de las cadenas estudiadas se acerca al reparto de los tres tercios que se aplica en Francia y que, dada la falta de criterio oficial al respecto en España, puede servir de referencia para Andalucía. La que más se aproxima es Giralda TV -que durante el periodo de elaboración del informe estaba plenamente operativa- con el 31% de tiempo de voz para la oposición. En el lado extremo se sitúan Telemotril (4%) y Fuengirola TV (1,7%).

El contenido de la televisión pública local, según el CAA, presenta también otros aspectos negativos. “La mayor parte del tiempo se dedica al deporte y no existe una distribución paritaria en los tiempos de palabra entre hombres y mujeres”, según expone Emelina Fernández, presidenta del CAA. De hecho, las intervenciones de mujeres son sólo un tercio del total, y además duran menos tiempo: un 27%. La presidenta del CAA es una defensora de este modelo “como televisión de proximidad, que está muy cerca del ciudadano y puede ayudarle en sus necesidades, pero para eso los contenidos deben ser los adecuados y no pueden ser exclusivamente un altavoz de las políticas del gobierno local de turno”.

Sector en crisis

Junto a esto, el sector se enfrenta a una crisis sin precedentes. Sólo desde 2010 han cerrado 26 emisoras, en su mayoría porque era analógicas y no entraban en la legalidad, pero más recientemente ha habido casos sonados de digitales, como Giralda TV en la capital hispalense -lastrada por la deuda- y TVM Córdoba, coincidiendo con el cambio de equipo de gobierno.

Un estudio desarrollado por la Universidad de Málaga -el primero con datos actualizados a diciembre de 2012- revela también que hay 14 consorcios proyectados pero que no han comenzado a emitir, fundamentalmente por falta de presupuesto. Esto, unido a las 16 legales, dejaría en una treintena el mapa, la mitad de lo contemplado en el Plan Técnico de la TDT de la Junta de Andalucía, que preveía un máximo de 72 públicas en todo el territorio. Manuel Chaparro Escudero, investigador principal de este proyecto, hace la siguiente radiografía del sector: “La crisis, el paso de la tecnología analógica a la digital y el cambio de signo político de muchos ayuntamientos tras las elecciones municipales han llevado a la desaparición de emisoras ya existentes o a guardar en un cajón proyectos para la creación de nuevas”.

“Creemos que debería replantearse la actual distribución de las demarcaciones de tal manera que las cuentan con los medios para seguir prestando servicio a su población puedan hacerlo de forma segura y legal”. Pone un caso para ilustrar la situación: “Onda Minera (Nerva) no está contemplada en ninguna demarcación a pesar de que viene emitiendo desde hace 10 años, cumple con todos los requisitos establecidos y presta cobertura al 50% de la población de la provincia de Huelva. De no ser por su empeño en sobrevivir, al margen de la ley, los pequeños pueblos de esta provincia, que juntos suponen un 8% de la población, perderían su acceso a la TDT”.

En su opinión el problema es que estas emisoras no tienen otra opción porque el mapa no se ha pensado bien. “La TDT ha sido un fiasco y para las locales, más”. Está, además, la lucha por la tarta publicitaria. Tal y como está pensado, pueden competir en una misma demarcación tres privadas y una pública. “Eso, en un área metropolitana puede medio sostenerse, pero no en otras demarcaciones”, argumenta, al tiempo que critica que en Andalucía no se haya negociado un cambio en la materia como sí se ha hecho en Cataluña. “Los alcaldes se la están jugando con una situación que podemos decir de alegalidad, pero prima el deber de informar al ciudadano, sobre todo cuando hablamos de un servicio que en muchos casos estaba ya consolidado”, asevera.

Con su mantenimiento al margen de la ley, los alcaldes se enfrentan a sanciones no inferiores a 300.000 euros. Muchos alcaldes están aguantando el pulso, entre otras cosas para no sumar más despidos, por el interés en contar con una herramienta de este tipo y porque no se está persiguiendo con empeño esta situación. De hecho, la última notificación judicial para un cierre la recibió el Ayuntamiento de Ayamonte, hace más de un año, cuando clausuró Guadiana TV por orden del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio.

La Asociación de Emisoras Municipales y Ciudadanas de Andalucía de Radio y Televisión (EMA-RTV), que lleva años defendiendo los intereses de estos canales y cuenta con más de 80 asociados, ha echado de menos más diálogo de las administraciones a la hora de establecer el mapa. Pedro Feria, su coordinador, es tajante: “Se ha pervertido el modelo de televisión municipal y se ha capitalizado de manera que sólo tienen acceso las capitales de provincia y unas pocas ciudades de más de 150.000 habitantes; mientras que las emisoras históricas de los municipios y comarcas más pequeños están cayendo”. Teme incluso que el plan de Madrid para limitar las competencias de los municipios terminará afectando a este servicio. Precisamente, la EMA-RTV está difundiendo desde hace unos días un manifiesto en defensa de estas cadenas para obtener adhesiones en su lucha por preservar este modelo.

De la más cara a la más barata

La otra cuestión clave es que estas emisoras estén bien dimensionadas: que su coste se adecúe a la población. Sus presupuestos varían: desde la más cara de Andalucía, Onda Jerez, que ha llegado a costar más de cuatro millones de euros al año, hasta la más económica, Telearacena, con 120.000 euros. Más que el coste, lo que termina lastrando estas emisoras es el descontrol, como ha sido el caso de Giralda TV, que ha dado el cerrojazo con una deuda cercana a los 12 millones de euros en dos años. O más incluso, Onda Jaén, unos 16 millones de euros de deuda que estuvieron a punto de costarle la disolución en 2009.

La tendencia general de los consistorios está siendo reducir sus transferencias para que estas entidades intenten sobrevivir con ingresos publicitarios. Lo ha hecho por ejemplo el Ayuntamiento de Huelva: para 2013 recibirá 156.900 euros de las arcas municipales, mientras que 203.000 euros deberá captarlos de publicidad. El consistorio asumía hasta ahora el 90% del presupuesto. Y hablamos de una televisión municipal que como, apuntaba Mercedes Sánchez, directora del área de Innovación, Calidad y Medios Audiovisuales, no tiene deudas.

La tentación de contar con una cadena propia -y no conformarse con la siempre más económica radio- es muy fuerte dada la influencia que ejerce este medio. Eso llevó incluso a que una treintena de cadenas controladas por el PP crearan una plataforma: la Asociación Independiente de Emisoras Locales de Radio y Televisión de Andalucía (AIERTA). Financiada con dinero público decía tener como objeto social “impulsar la TDT en Andalucía” para lo que los asociados comenzaron a poner contenidos en común y hacer adquisiciones de la mano, principalmente a canales conservadores como Libertad Digital o Intereconomía. Pero esta asociación, que muchos vieron incluso como la maniobra del PP para contrarrestar el peso de Canal Sur, parece haberse esfumado. Su web ya no está operativa, y llamando a Onda Cádiz, donde tenía la sede, hay quien contesta que sí funciona y quien dice que ya no existe. Misterioso, como hace un par de años lo eran sus fines.

Televisiones públicas locales en regla y operativas:

  • TVM Écija
  • RTV Marbella
  • Onda Azul
  • Fuengirola TV
  • RTV Estepona
  • Torrevisión TV
  • Onda Jaén
  • Huelva TV
  • Doñana TV
  • RTV Motril
  • TG7 Granada
  • Costa Noroeste
  • Onda Jerez
  • Onda Cádiz
  • Onda Algeciras
  • Interalmería

Fuera de demarcación:

  • Radio Unión TV Los Palacios
  • El coronil TV
  • Aznalcóllar TV
  • 3.40 TV Mijas
  • Manilva TV
  • Canalcoín RTV
  • Alhaurín el Grande TV
  • TV Marmolejo
  • Onda Minera
  • RTV Tarifa

Analógicas:

  • FaroTV
  • RTV Chipiona
  • San Roque RTV
  • Canal 54
  • Telearacena
  • Palos TV
  • Onda Castilblanco
  • TVM Herrera
  • Puebla TV
  • RTV Marchena
  • Osuna TV