El varapalo a la aceituna negra española, primera víctima de la política proteccionista de Donald Trump y que marcó el camino de una senda imparable, se va a quedar corto después del nuevo tanto que se ha apuntado EEUU en su batalla comercial con el mundo, y en este caso, por una que empezó hace 15 años y en la que acaba de obtener el beneplácito de la Organización Mundial del Comercio. Ha declarado ilegales los subsidios de la UE a Airbus y que habrían hecho perder unos 6.900 millones de euros en ventas potenciales a su rival de EEUU, Boeing, por lo que le permite, para resarcirse, multiplicar las tasas de frontera.
De nuevo, es un golpe de lleno para Andalucía porque una de las primeras candidatas a sufrir las penalizaciones -que para los productos agrícolas llegarán hasta el 25%- es el aceite de oliva, del que exporta tres de cada cuatro euros que vende España. Pero hay más, en el otro ámbito sobre el que EEUU ha puesto el foco, el aeronáutico, con incrementos en los aranceles de hasta el 10% en este caso, también lidera Andalucía las exportaciones españolas.
En este sentido, según los últimos datos de la Agencia Andaluza de Promoción Exterior (Extenda), la comunidad autónoma lideró en 2018 las exportaciones aeronáuticas de España a todo el mundo, con 2.692 millones de euros (prácticamente la mitad del total) y de aceite de oliva, con 2.486 (75% del total). Por segundo año consecutivo, además, vendía más en aeronáutica que en aceite de oliva, su clásico. Pero de esa cuestión, que en repetidas ocasiones han celebrado las autoridades en Andalucía, se ha derivado la paradoja de que la culpa del avión la pagará el campo.
Eso sin contar con que esta medida también afectará a la aceituna de mesa -esta vez a la verde- donde Andalucía no es ya líder española en exportaciones, sino mundial, con más de 500 millones de euros en 2018, y EEUU su primer destino, con un tercio de la cuota del mercado, también según datos de Extenda.
Este miércoles el Gobierno de EEUU publicaba su lista definitiva (“final list”, reza, si bien las autoridades y organizaciones empresariales españolas insisten en que no es la definitiva y que se sabrá en dos semanas) de productos que se verán afectados, la mayoría de ellos del consorcio Airbus (Alemania, España, Francia y Reino Unido). Sirva como referente un dato: tras un año de aplicación de los aranceles sobre la aceituna negra, Andalucía ha perdido más de la mitad de las ventas en EEUU y ya da por perdido ese mercado.
Para ver qué peso tienen esos productos de la nueva lista en el mercado estadounidense, basta con mirar los datos de la Secretaría de Estado de Comercio. En 2018 España exportó 405 millones de euros en aceite de oliva a EEUU, y como se ha dicho tres de cada cuatro salieron de Andalucía. Fueron un 8,7% menos que en 2017, pero prácticamente el doble que tres años antes. En aceituna de mesa fueron 142 millones de euros los vendidos por España a EEUU, de nuevo por un producto salido en su mayoría desde Andalucía. En cuanto a aeronáutica, la cifra en 2018 fue de 99 millones de euros exportados desde Andalucía a EEUU, la mitad del total que le vendió España, y pese a ser una cantidad modesta todavía, supuso un 70% más que el año anterior.
De manera que, sumados estos tres frentes, hablamos de más de 550 millones de euros que exporta Andalucía a EEUU que pueden verse afectados, sin contar otros productos igualmente incluidos como los lácteos o ciertas frutas y hortalizas, en menor medida. En el caso de la aceituna negra, el impacto fue sobre 70 millones de euros en exportaciones a EEUU, por lo que este es siete veces más fuerte.
Si tenemos en cuenta que COAG calculaba este jueves en unos 1.000 millones de euros las exportaciones de productos agroalimentarios españoles afectados por el incremento e impuestos de EEUU -incluye el vino, con más de 300, como otra de las grandes víctimas pero en el caso del sur tiene menor peso- podemos decir que el grueso de las consecuencias de la medida recaerá en la economía de Andalucía.
Para verlo en su conjunto, hay que tener en cuenta que España le compra ligeramente más productos de los que le vende a EEUU, mientras que en servicios se produce lo contrario. En concreto, en 2018 España exportó a dicho país mercancías (de todo tipo y no solo las citadas) por valor de 12.791 millones de euros (fueron 11.504 en 2015, como referencia) e importó 13.152 (12.828 en 2015).
El consejero de Economía, Conocimiento, Empresas y Universidad, Rogelio Velasco, ha reconocido este jueves la gravedad del tema y ha anunciado que el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, pedirá “una reunión de urgencia” del Gobierno de la Nación -en funciones- con todas las comunidades autónomas para que cuente con “una postura común, unificada y compartida” por las autonomía.
Ha reconocido que “esto afecta especialmente” a Andalucía, que cuenta con “dos polos importantes” del sector aeronáutico en Sevilla y Cádiz, y es líder en el olivar “muy concentrados en Jaén y Córdoba que se van a ver también afectados”, según ha dicho en declaraciones recogidas por Europa Press.
Desde COAG, su secretario general, Miguel Blanco, ha comentado que “resulta totalmente injusto y desproporcionado que, una vez más, el sector agrario sea el pagano de una guerra comercial de la UE que no tiene nada que ver con el campo”, que sufre las consecuencias de “un conflicto que tiene su origen en el sector aeronáutico”.
Desde UPA, por su parte, han reclamado una respuesta “contundente” del Gobierno de España, país donde los sectores clave más afectados “son el olivar, el porcino, el vino, las frutas y los lácteos”. Para continuar: “Los agricultores y ganaderos españoles vuelven a ser las principales víctimas colaterales del conflicto comercial que está orquestando el magnate Donald Trump”. Cierto es que en este caso, no empezó él, sino sus predecesores.
Por último, Asaja ha pedido “máxima presión internacional” contra la medida. “Si no podemos permitir que nuestra agricultura sea moneda de cambio en acuerdos con terceros, menos aún vamos a tolerar que nuestro sector sea el rehén indefenso en las guerras comerciales entre las potencias mundiales”, ha comentado el presidente de Asaja, Pedro Barato.