El Prismático es el blog de opinión de elDiario.es/aragon.
Las opiniones que aquí se expresan son las de quienes firman los artículos y no responden necesariamente a las de la redacción del diario.
Me piden que escriba, desde el estómago, un artículo sobre iDental, entendido, intentaré no utilizar demasiados tacos.
Pongo “iDental” en mi San Google y, por fin, a 21 de enero de 2019, aparecen este tipo de titulares de medios nacionales, “Los tribunales certifican el desmoronamiento del imperio iDental”, “La investigación de iDental destapa una segunda trama de estafa”, “iDental, el calvario de los afectados”. Hace tiempo que los esperábamos… Yo no fui de las primeras en la batalla contra iDental. Antes de que yo me uniera, ya luchaban y siguen luchando valientes afectadas como Raquel (Alicante), Paz (Canarias), Pilar (Madrid), Ana (Madrid), Gonzalo (Granada), Francisco (Alicante), Mery (Zaragoza)… y muchas más, personas maravillosas que he ido conociendo en este tiempo y de las que no sé bien cómo trasmitir su capacidad de trabajo y su fuerza.
Hasta llegar aquí hemos oído muchas veces cosas como “iDental es una estafa y por tanto el legislativo no puede hacer nada”, “iDental no es un tema de sanidad”, “iDental no es consumo”, “iDental no es noticia”….
De todas esas afirmaciones me quedo con esta: “iDental es una estafa”, pero yo añado, “iDental no es solo una estafa”. Personalmente considero idiotas a quienes todavía no lo hayan entendido. iDental es también sanidad, es la mayor crisis sanitaria de España y es, además, una prueba palpable, el ejemplo perfecto, que evidencia varios agujeros del sistema.
El agujero del sistema de la sanidad pública, la salud bucodental no forma parte de las carteras sanitarias, no existe ni siquiera un plan de salud bucodental del ministerio, como sí hay en Chile o Argentina por poner dos ejemplos, ni tampoco en las comunidades autónomas; cuestión sobre la que se debe reflexionar y plantear seriamente en este país y que da origen a una clara desigualdad sanitaria en la población, entre quienes pueden y quienes no pueden pagar sus tratamientos de salud bucodental, y no hablo de cuestiones estéticas, sino de funcionalidad, dientes para poder comer me dicen las afectadas que pedían y piden.
Un agujero de la normativa de las sociedades profesionales, cualquier persona con la normativa actual puede abrir una clínica dental, la proliferación de cadenas y franquicias en las ciudades es un hecho; el propio Luis Sans (actualmente detenido y socio de Weston Hill, fondo de inversiones de patrimonios que adquirió iDental) estaba montando una nueva cadena de clínicas.
“Emprendedores”, leí el otro día en un titular al lado del nombre de Pellicer y Castañer, gloriosos fundadores de iDental. Quienes me conocen ya saben lo que digo al respecto… entonces yo soy la niña de los peines.
Es más, con la situación y normativa actual yo recomiendo encarecidamente montar una cadena de clínicas dentales, sobre todo si no tienes intención de atender a los pacientes, es un negocio redondo, tienes el cliente asegurado, somos aproximadamente 40 millones de personas y todos tenemos una boca… no cubierto por la sanidad pública, una buena campaña de publicidad y a esperar que entren.
El problema de cómo te van a pagar está resuelto a través de los créditos al consumo, fantástico invento, que igual sirve para pagar una lavadora, un tratamiento médico o una comunión. En 24 horas la financiera te da el dinero y el o la pringada se queda con la deuda aunque tú no le termines el tratamientos y diga lo que diga la ley 16/2011. (Ley de créditos al consumo).
El caso iDental pone de manifiesto el agujero de los controles que deben ejercer las administraciones. La mayor parte de las clínicas iDental no disponían de licencias municipales, algo que denunció una afectada, y sin embargo contaban con las autorizaciones y renovaciones de apertura como centros sanitarios privados otorgadas por las correspondientes administraciones sanitarias autonómicas, igualmente nos explican, pasaron controles e inspecciones sanitarias a pesar de incluir laboratorio protésico y clínica en el mismo espacio y de las actuales pruebas de falta de esterilización del material y formación del personal.
Agujero de las normas de protección de personas consumidoras y de sus estructuras, muchas de las personas afectadas al detectar que se retrasaban o no se cumplían sus citas empezaron dirigiendo sus reclamaciones a consumo, llegaban cientos de reclamaciones a los organismos públicos de consumo, pasaban inspectores y todo estaba bien, nos dicen, aunque la empresa no entregaba facturas y falseaba los datos económicos y personales para la concesión de los créditos; agujero en el ámbito de los colegios profesionales, por su limitadísimo margen de actuación frente a estas cadenas y franquicia.
Importante el agujero en el ámbito de la publicidad engañosa y la comunicación. Idental gastaba 18 millones en publicidad, en la que aparecían personajes famosos que repetían lemas como “dentocracia” y “ayudas sociales y subvenciones” que no existían, y ningún organismo consiguió que esa publicidad dejara de emitirse. Seré exacta, solo la denuncia de Actora Consumo ante Autocontrol obtuvo una resolución que pedía la rectificación de la misma por incumplimiento de la norma de publicidad sanitaria y de información de los créditos al consumo. Por cierto, con esto de los lemas, me viene a la cabeza algún otro que sigo oyendo todos los días y que anuncian métodos que tampoco existen.
Por omisión, por incompetencia, por cobardía, por avaricia… entre todos hicimos grande el monstruo. ¿No veíamos los inmensos locales?, autobuses enteros llenos de pacientes, cientos de reclamaciones en los organismos de consumo, repito 18 millones en publicidad…. eso son muchos anuncios en prime time en las televisiones.
Administraciones, estatal, autonómicas y municipales, políticos, asociaciones de consumidores, medios de comunicación, propietarios de locales, sindicatos, trabajadores…me parece que me dejo algo… ¡¡los pacientes!!
Cuando una persona va a un centro sanitario, sea este público o privado, es porque está enferma o porque se va a hacer una revisión, por tanto, diré PACIENTES con mayúsculas.
Estadísticamente, porque aún no existe un censo oficial de afectados, los pacientes de iDental eran personas sin demasiados recursos económicos y con una necesidad sanitaria, cuidar su boca. Muchas de nosotras entramos en esa categoría/target.
iDental nunca tuvo intención de terminar los tratamientos iniciados, solo había que seguir alimentando a la bestia y continuar captando pacientes y que firmaran créditos; quitarles dientes sanos para colocar sus “fast and perfect ”y joderle la vida a la gente han sido solo los daños colaterales del negocio.
Las personas afectadas por iDental necesitan urgentemente que se les cure, sus bocas, su salud, su autoestima están muy dañadas. Tienen dolores, trastornos digestivos y graves depresiones derivados se los tratamientos o de la falta de los mismos. De los Presupuestos Generales del Estado pendientes de aprobación pido, suplico que los partidos políticos que han presentado iniciativas legislativas en relación con el caso iDental, preguntas en el Congreso y en el Senado, que nos han recibido y prometido apoyo y ayuda se pongan de acuerdo y destinen una partida de emergencia para curarles. Si no forma parte de la cartera sanitaria no se les cura es así.
Capítulo especial reservo para el juez Jose de la Mata. Gracias por existir, por trabajar como lo hace, sé que el procedimiento está en fase de instrucción y no debo nombrarle demasiado, pero confieso para terminar, que estoy deseando varias cosas, y por este orden: que se cure a las personas afectadas, algo que ni el juez ni Actora Consumo podemos hacer, que se depuren responsabilidades y se indemnice y compense el sufrimiento de las afectadas¡, e invitar a un café o a lo que le guste al juez de la Mata cuando todo esto termine y decirle personalmente, juez de la Mata en ti he confiado siempre, gracias.
Me piden que escriba, desde el estómago, un artículo sobre iDental, entendido, intentaré no utilizar demasiados tacos.
Pongo “iDental” en mi San Google y, por fin, a 21 de enero de 2019, aparecen este tipo de titulares de medios nacionales, “Los tribunales certifican el desmoronamiento del imperio iDental”, “La investigación de iDental destapa una segunda trama de estafa”, “iDental, el calvario de los afectados”. Hace tiempo que los esperábamos… Yo no fui de las primeras en la batalla contra iDental. Antes de que yo me uniera, ya luchaban y siguen luchando valientes afectadas como Raquel (Alicante), Paz (Canarias), Pilar (Madrid), Ana (Madrid), Gonzalo (Granada), Francisco (Alicante), Mery (Zaragoza)… y muchas más, personas maravillosas que he ido conociendo en este tiempo y de las que no sé bien cómo trasmitir su capacidad de trabajo y su fuerza.