El gobierno municipal del PP en Zaragoza ha licitado sendas auditorías para analizar si mantiene los 63 kilómetros de ciclocarriles, que facilitan la circulación de bicis en la ciudad al limitar a 30 kilómetros por hora la velocidad, para estudiar por otro lado los carriles bici de cara a introducir posibles mejoras en la seguridad y, por último, para analizar la posibilidad de que las motocicletas puedan circular por el carril reservado al autobús urbano.
Estos dos contratos menores se anunciaron el 10 de octubre y en ellos se solicita en concreto una “auditoría que analice la red de carriles bici del termino municipal de Zaragoza, desde el punto de vista de la seguridad vial, de la capacidad y de la conexión de los mismos con otras infraestructuras ciclables”.
En la orden de inicio de la licitación sobre los ciclocarriles, y tras explicar que el origen de esta red surgió con la pandemia, figura que entre sus ventajas están la seguridad para los ciclistas, la conectividad urbana y la promoción de la movilidad sostenible. Mientras, entre inconvenientes se indican el hecho de que los ciclistas compartan el espacio con los vehículos a motor, lo que puede “generar conflictos”, y la velocidad de estos mismos vehículos.
Este miércoles, el concejal del PSOE Chema Giral ha criticado el “desorden y caos” en movilidad del Gobierno de la ciudad por estas tres auditorías, que desde su punto de vista “perjudican el transporte público, dañan la movilidad sostenible” y “hacer retroceder más de una década la movilidad”.
Respecto a los ciclocarriles, Giral ha destacado la ventaja que ofrecen al limitar la velocidad del carril de la derecha a 30 kilómetros por hora y “proporcionar más seguridad a vehículos tradicionales, patinetes o bicicletas”. “Sobre todo son útiles en aquellas zonas donde no hay carril bici, ya que es más segura la circulación”, ha apuntado.
En cuanto a los carriles bici, el edil socialista ha recordado que Zaragoza es pionera en crear una red de carriles bici, con 140 kilómetros, de los que la “inmensa mayoría”, 120, se han construido por gobiernos socialistas; doce, por Zaragoza en Común, y “apenas” seis, por el actual gobierno del PP. “Mucho nos tememos que vayan a eliminarse alguno de estos carriles por petición de Vox”, ha advertido Giral.
Por otro lado, ha asegurado que la inclusión de otros vehículos por los carriles bus “perjudicará la eficiencia y las frecuencias de los autobuses” y al colectivo del taxi. “Aunque al principio anuncien que es para la inclusión solo de motocicletas, tenemos que recordar que, a petición de Vox, la ordenanza de Movilidad incluyó que estos carriles se conviertan en carriles multiusos. Es decir, que por estos carriles puedan circular en poco tiempo, la inmensa mayoría de vehículos existentes”, ha censurado.
“Falta de rigor”
Desde el Gobierno de Zaragoza han contestado a Giral que el PSOE “vuelve a tergiversar” la realidad en un “intento de confundir a la opinión pública”. Han recordado que la nueva Ordenanza de Movilidad, en su Instrucción Técnica número 10, fija de manera “estricta” los criterios a seguir para que algún carril bus pueda ser utilizado, de manera temporal o permanente, por otros vehículos que no sean buses o taxis.
El estudio técnico que se hará pretende analizar esta posibilidad, pero en la hipótesis de que algún carril se usara para otros vehículos, se deberá contar de “forma imperativa” con informes favorables de diferentes servicios municipales, como Movilidad, Policía Local, Bomberos, entre otros.
Por otro lado, han afeado al PSOE que lanza la idea de que el Gobierno de Zaragoza quiere eliminar carriles bici cuando “lejos de ello, se están construyendo nuevos carriles”. Así, han indicado que se han construido nuevos carriles en los últimos años en la zona de Romareda, la avenida Pablo Picasso, la conexión Delicias-Almozara, Cuarte y Malpica, entre otros. “En tres meses comenzará un nuevo servicio de Bizi Pública que mejorará de manera exponencial el actual”.
Finalmente, sobre los ciclocarriles, desde el Gobierno de Zaragoza han indicado que se puede constatar que, cuando se anuncian estas vías se trazaron en la calzada, en plena pandemia, para “facilitar” la movilidad ciclista en aquella época tan incierta, conectando carriles bici y mejorando la seguridad vial en el caso de circular por la calzada. “Ahora -han precisado- se pretende averiguar objetivamente qué carriles son verdaderamente utilizados y cuáles no. Y analizar si realmente ayudan a esa movilidad ciclista en algunos de sus recorridos”.
El Gobierno de Zaragoza ha lamentado la “reiterada falta de rigor” de algunos grupos de la oposición al analizar la política municipal, en una estrategia que “sólo sirve para fomentar la desinformación o la confusión sobre asuntos sensibles, como es en este caso la movilidad ciclista”.