La ministra de Sanidad, Mónica García, ha elogiado la nueva orden de fidelización de los MIR en Aragón y ha reconocido que lo ha situado como un ejemplo de “buena planificación” para el resto de las comunidades autónomas.
García ha asegurado, en declaraciones a los medios de comunicación este jueves antes de visitar el Hospital Miguel Servet de Zaragoza, que Aragón es una de las comunidades autónomas que ha elaborado una buena planificación para fidelizar especialistas sanitarios que consiste en “darles lo que necesitan”, previo diálogo con ellos.
A primera hora de este jueves, la ministra de Sanidad se ha reunido con el consejero del ramo, José Luis Bancalero, quien le ha expuesto las “peculiaridades” que presenta la comunidad autónoma y que hacen que la asistencia sanitaria sea más costosa que en otros territorios de España.
Bancalero ha apuntado: “Nos han parecido muy bien todas las medidas presentadas desde el Ministerio de Sanidad para impulsar las carencias que tenemos de profesionales y de algunas estructuras en nuestro territorio”. Además, el consejero autonómico ha “tendido la mano” desde el Gobierno de Aragón para avanzar en la mejora de la sanidad en la comunidad autónoma.
Por su parte, Mónica García ha reconocido el “esfuerzo” del Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón por “cuidar y mimar” a los profesionales sanitarios para que este verano, “una época que siempre es complicada”, se palie el déficit a través de “incentivos, diálogo y planificación”.
Asimismo, la ministra ha asegurado que se trabajará junto al Ejecutivo autonómico en la búsqueda de soluciones para los desafíos que presenta la sanidad en la actualidad, como son el cambio demográfico y el envejecimiento de la población. En este sentido, ha observado que Aragón es la segunda comunidad autónoma con más población envejecida.
En cuanto a la fidelización de especialistas sanitarios, una gestión por la que Mónica García ha felicitado al Gobierno de Aragón, ha añadido que “aumentar la calidad laboral es parte de las competencias de las comunidades autónomas, pero siempre tendrán el respaldo del Ministerio de Sanidad”.
La orden promovida en Aragón contempla dos líneas de mejoras diferentes según se haya finalizado o no la formación MIR: Para aquellos que ya hayan superado ese periodo, la sanidad aragonesa les ofrecía contratos de hasta tres años; una contratación combinada para matrimonios o parejas; la búsqueda de vivienda y centro educativo para los hijos, además de jornadas flexibles, estancias periódicas en hospitales de la capital aragonesa, así como másteres, una mejor valoración de méritos y un plus económico de fidelización de hasta 30.000 euros repartidos en 6.000 euros durante el primer año, 9.000 euros el segundo y 15.000 euros el tercer año.
En el caso de aquellos profesionales próximos a finalizar su formación, Aragón propone una adenda a su contrato actual para trabajar, de forma voluntaria, durante el verano, en centros de difícil cobertura, con un incentivo económico y tutorizados.
Ha indicado que el Sistema Nacional de Salud está dimensionado para el otoño y para la primavera, motivo por el que se dan “serias dificultades en verano y en invierno”. Así, ha invitado a la reflexión como país y ha reclamado mayor inversión para subsanar esta problemática que se repite cada año.
La ministra de Sanidad ha aseverado que “ha recogido el guante” de las reivindicaciones planteadas por Aragón respecto a la necesidad de impulsar medidas ante la falta de profesionales, flexibilizar los criterios para crear más unidades de docentes o la homologación de títulos.