El pasado 7 de julio Jorge Azcón fue propuesto por Marta Fernández, la presidenta de las Cortes de Aragón, como el único candidato a presidir la comunidad autónoma. Hoy, 9 de agosto, se ha iniciado el debate de investidura que concluirá con la proclamación de Azcón tras lograr los apoyos de Vox —que tendrá una vicepresidencia y dos consejerías— y el Partido Aragonés (PAR). En esta primera sesión, Azcón ha hecho su discurso, enfocado en cuatro grandes puntos, y que será contestado mañana jueves por el resto de grupos parlamentarios.
Azcón ha empezado su discurso mostrando su repulsa “más enérgica” por los tres asesinatos machistas que han tenido lugar en las últimas horas. “Esa violencia injustificable que sufren las mujeres es una lacra social intolerable, y la obligación de las instituciones y las administraciones públicas es denunciarla, condenarla y combatirla con todos los instrumentos y recursos legales disponibles”, ha expresado en futuro presidente de Aragón, que ha pactado con un partido que niega la existencia de la misma, Vox, y cuyos diputados han sido los únicos que no han aplaudido este recuerdo de Azcón a las víctimas.
Al inicio de su discurso ha dedicado unas palabras al resto de grupos, agradeciendo a Podemos, CHA e Izquierda Unida que se reuniesen con él en la ronda de contactos por “mantener las formas” y “trasladarnos personalmente su legítima negativa a participar en la gobernabilidad para ejercer la imprescindible labor de oposición”. En este punto ha hecho referencia al PSOE, que fue el único grupo que no se reunió con Azcón durante este proceso.
Ha dedicado también un espacio a Teruel Existe y a Tomás Guitarte, por su “talante abierto y dialogante que tanto le diferencia de otras posiciones absurdas de trinchera y sectarismo” Y ha hecho referencia a que, aunque no se haya llegado a un acuerdo de Gobierno con esta formación, que no estaba dispuesta a pactar con Vox, sí que se ha podido colaborar en “otras instituciones”, refiriéndose a la Diputación de Teruel.
El apartado de agradecimientos lo ha cerrado hablando de sus dos socios, Vox y el PAR, con siete y un escaño cada uno respectivamente, que se suman a los 28 del PP, lo que otorgará a este gobierno una mayoría con 36 apoyos. En primer lugar, a pesar de solo contar con un escaño y no ser necesario para la gobernabilidad, ha destacado el papel del PAR agradeciendo a Alberto Izquierdo su “afán encomiable en la mesa de negociación por abrir espacios de diálogo y entendimiento”. El último reconocimiento ha sido para Vox y para Alejandro Nolasco, el líder del partido en Aragón que va a ostentar una vicepresidencia. “Las tres formaciones que hemos alcanzado estos dos acuerdos somos tres partidos diferentes, con posiciones ideológicas distintas a las que no renunciamos, pero como gobierno defenderemos de forma unívoca los pactos alcanzados y trabajaremos en sintonía para llevarlos a cabo”, ha concluido.
Rebajas de impuestos y “libertad de las familias” en educación
En cuanto al programa de gobierno, Azcón ha explicado que se va a organizar en cuatro ejes: política fiscal, facilitar las oportunidades, garantizar el bienestar y convertir la administración en un organismo ágil.
Al respecto del primer punto, Azcón ha anunciado una rebaja del tramo autonómico del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas y la eliminación a lo largo de la legislatura el Impuesto de Sucesiones y Donaciones hasta su mínimo legal.
También ha comunicado su intención de “constituir una comisión de investigación sobre la implantación de las energías renovables y las múltiples irregularidades que han sido denunciadas” y la creación de “un Observatorio de la Energía que paute, racionalice y vigile el adecuado dimensionamiento del sector y su desarrollo”.
Respecto al agua y la sequía, un tema candente durante las negociaciones por las posiciones contrarias de los que finalmente van a ser socios de gobierno, Azcón ha defendido “la ejecución íntegra de las obras hidráulicas del Pacto del Agua y de las obras eliminadas en la última revisión del Plan Hidrológico de la Cuenca del Ebro”.
Azcón ha dicho que todas las acciones de gobierno deber ser ejercidas “con medidas ambientalmente sostenibles y que encajen dentro del esfuerzo irrenunciable por luchar contra las emisiones contaminantes y el cambio climático. Sólo tenemos un planeta y hay que conservarlo íntegro para las próximas generaciones”, un discurso que también choca con la visión de Vox, su principal socio, de este asunto, puesto que el partido de extrema derecha niega la existencia del cambio climático.
En el punto dedicado a oportunidades ha hablado de educación y de la “libertad de las familias”, explicando más adelante que se va a “avanzar en la gratuidad de la educación de 0 a 3 años, así como en la inclusión progresiva del Bachillerato en el sistema de concertación educativa”. Esta referencia al sector privado también ha estado más adelante, cuando ha hablado de sanidad: “Al mismo tiempo que vamos a mejorar los recursos públicos, también vamos a mejorar la cobertura sanitaria impulsando decididamente la colaboración público-privada”.
La despoblación, los problemas de acceso a la vivienda y la necesidad de banda ancha en todo el territorio también han formado parte del discurso.
En el apartado dedicado a la administración ha anunciado, entre otras cosas, la intención de este gobierno de suprimir “los comisionados para la Agenda 2030, para la infancia y para la despoblación, que únicamente suponen gasto innecesario en puestos de colocación personal cuyas funciones estarán perfectamente recogidas a través de las consejerías y sus direcciones generales”.