Se cumple un mes desde que el alcalde de Huesca, Luis Felipe, destituyera a los cuatro concejales de Cambiar Huesca que completaban el equipo de gobierno que ahora conforman PSOE y Aragón Sí Puede. En este tiempo se han tenido que adaptar a la oposición y dejar sus actividades en varias áreas relevantes a pocos meses de las siguientes elecciones municipales. La “pérdida de confianza” en sus antiguos socios a raíz de las críticas de estos a la gestión informativa de los dos presuntos casos de agresiones sexuales en las fiestas de San Lorenzo ha llevado a Felipe a gobernar en minoría, con una suma de diez de los 25 ediles del Consistorio.
En este periodo, Cambiar Huesca se ha comprometido a ser “garante de las políticas de izquierdas” en el Ayuntamiento, sin renunciar a oponerse a algunas de las medidas propuestas por la corporación y a alinearse, en algún caso, con el Partido Popular, como sucedió en el pleno extraordinario en el que se votó la puesta en marcha de la comisión de investigación que tratará de desentrañar la responsabilidad del Consistorio en la comunicación de las dos presuntas agresiones sexuales. Tampoco aparece en su agenda por el momento la posibilidad de una moción de censura para la que se tendrían que alinear en ‘pinza’ con los populares y Ciudadanos.
La concejala Pilar Novales entiende que la decisión del alcalde respondió a “una necesidad de liberarse de los compromisos adquiridos para el desarrollo de políticas de izquierda”. Además, la hasta ahora responsable del área de Desarrollo del Consistorio asegura que el grupo estará “expectante” ante la puesta en marcha de aquellos proyectos “que ya están a punto de salir y que ha gestionado Cambiar Huesca. Veremos si hay voluntad o no”.
Proyectos como la Escuela de Segunda Oportunidad, las rutas histórico-culturales, la incubadora de empresas o la electrolinera, que son iniciativas que Desarrollo iba a poner en marcha en los próximos meses. Igual suerte corren los numerosos pliegos que siguen sin salir adelante en el área de Medio Ambiente, como denuncia su hasta ahora concejala, Carmen García, que subraya que “ha sido en este mandato y con el impulso de Cambiar Huesca cuando se han materializado proyectos como la programación educativa, el compostaje, políticas energéticas, la realización de campañas de sensibilización o la creación del Aula Verde”.
“Queremos seguir velando por el bienestar de las personas”, sostiene la exconcejala de Servicios Sociales, Silvia Mellado, que seguirá de cerca la realización de las obras en el albergue municipal que están a punto de iniciarse, así como el proyecto de intervención comunitaria en el barrio del Perpetuo Socorro a cargo de la asociación Asalto. Mellado hace balance de su paso por Servicios Sociales con hitos como la remodelación del área, la realización de un mapeo con los servicios de salud que existen en la ciudad o los primeros frutos en la política de reducción del chabolismo en Huesca.
Mellado es tajante a la hora de afirmar que no se ha avanzado “nada” desde que los concejales de Cambiar Huesca fueran cesados y pone como ejemplos retrasos en el área de Servicios Sociales en la convocatoria de órganos como el Observatorio de la Convivencia con el fin de analizar las fiestas de San Lorenzo o el Consejo de Salud. Novales lamenta que el actual responsable del área de Desarrollo, el socialista Fernando Gállego, no se haya puesto en contacto con ella para abordar temas pendientes de “mucha importancia para nosotros y para la ciudad”.
Cambiar Huesca entiende que existen muchos temas pendientes y proyectos que estaban a punto de salir “y por los que velaremos para su realización o para que vean la luz”, se apostilla desde el grupo municipal, que mantiene su compromiso de permanecer vigilante en la puesta en marcha de todas las políticas que dejaron hilvanadas a escasos meses de concluir el actual mandato.
También lamentan que el equipo de gobierno pretenda ahora “negar la representatividad de este grupo en las comisiones informativas”. Lo proclama tras observar como en la última comisión informativa de Medio Ambiente se negó el voto ponderado de los grupos, la proporcionalidad otorgada por las urnas. Para el grupo municipal, este asunto es de vital importancia puesto que supone “nada más y nada menos que la representatividad de cada grupo político, que no surge de la voluntad de un alcalde ni de un grupo, surge de la voluntad de la ciudadanía expresada en votos”.
Según su portavoz, Carmen García, “es una manera zafia y chulesca de intentar anular la representatividad legítima de Cambiar Huesca, que pretende igualar a la de otros grupos con la mitad de concejales. El PSOE quiere negar la realidad que el propio alcalde ha escogido, la de no tener mayoría en la corporación”.