El Instituto Aragonés de Gestión Ambiental (Inaga) ha rechazado las declaraciones de impacto ambiental de los proyectos de ubicación de dos macroparques solares en el municipio pirenaico de La Fueva (Huesca), tras considerar insuficientes las medidas preventivas y correctoras planteadas.
Según informa la plataforma “La Fueva no se vende”, la resolución del organismo medioambiental descarta la tramitación de los proyectos mediante procedimientos simplificados y requiere a las empresas promotoras una evaluación de impacto “más exigente”, de carácter ordinario.
Ambos proyectos prevén la ocupación de 130 hectáreas de suelo para la instalación de placas solares con capacidad de generar 91 megavatios de potencia.
Además, continúa pendiente la declaración de impacto ambiental de un tercer parque fotovoltaico que prevé ocupar 54 hectáreas más en la zona, el de Ussía, de 50 megavatios de potencia y todavía en tramitación en el Ministerio para la Transición Ecológica.
Dese 'La Fueva no se vende' destacan que la resolución del Inaga recoge los argumentos tanto de la plataforma como de instituciones y asociaciones, referidos a los potenciales efectos negativos que supondrían para la zona los dos proyectos rechazados sobre el paisaje, la hidrología, la economía y la fauna protegida. Así, se alude a 19 puntos complementarios a analizar que exigen la realización de estudios socioeconómicos sobre la afectación de los proyectos en la población del valle y de concreción de los impactos a las vías pecuarias.
También se solicita un estudio comparativo de la situación ambiental actual y posterior a la instalación de las placas fotovoltaicas, y otro del impacto que tendrían los tres parques proyectados en su conjunto.
La Plataforma “La Fueva No se Vende” ha valorado con “optimismo” la decisión adoptada por el Inaga, aunque admite a renglón seguida que “no se puede bajar la guardia ante la amenaza que todavía se cierne sobre sus cabezas”. El Ayuntamiento de La Fueva continúa con los trámites previos de aprobación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) del municipio, cuya aprobación definitiva, añaden, “pararía, con toda probabilidad, la implantación de los proyectos de parques macrosolares”.
Además de exigir un estudio más amplio de impacto ambiental, en la resolución del Inaga, publicada el pasado 17 de agosto, se insta a las empresas solicitantes a solventar otras cuestiones que deben analizarse con mayor detalle antes de considerar los proyectos.