El Ayuntamiento de Zaragoza solo desalojará la vivienda okupada afectada este martes por la fuga de agua en el edificio de la calle Mariano Cerezo 42, en el Casco Histórico, porque no ha habido daño estructural y porque el resto están bien mantenidas. Se da la circunstancia de que, además, esta vivienda estaba ocupada de forma ilegal y “no tenía ni luz, ni agua, ni suministros”, mientras que el resto de vecinos tienen su contrato de arrendamiento, ha informado el consejero municipal de Urbanismo, Víctor Serrano.
Esta pasada noche, los bomberos han acudido a este inmueble donde se ha producido un hundimiento parcial del suelo que separa la planta baja con la bodega y que al parecer no reviste gravedad. Los dos metros de desprendimiento se localizan en una zona común del edificio en la planta calle, y se ha detectado que puede ser debido a una fuga de agua de la comunidad, por lo que se ha apuntalado parte de la bodega, sin requerir el desalojo de residentes. En rueda de prensa, Víctor Serrano, ha comentado que este incidente ha coincidido con que en el número 39 de la misma calle se producirá la demolición completa del edificio y no se mantendrá la fachada.
Sobre la Inspección Técnica de Edificios (ITE) ha dejado claro que compete a los propietarios y sobre la periodicidad legal de pasarla cada 10 años ha dicho que rebajar ese plazo “en estas edificaciones no hace nada”. Al respecto, ha dicho que en esta zona se pueden estar cometiendo delitos flagrantes “porque, además, lo cuentan los vecinos” y justo se da la casualidad de que estas circunstancias, como la fuga de agua, se producen en edificios ocupados “con la comisión de delitos flagrantes, con actividades ilícitas relacionadas con el mercadeo y las transacciones mercantiles ilícitas”.
A su parecer, “no solo se soluciona solo con el urbanismo, sino con la seguridad y un plan de acción decidido para acabar con situaciones delincuenciales, que se cometen a plena luz del día y hacen que la regeneración del barrio no se pueda acometer desde el urbanismo”.
El Ayuntamiento, ha estimado, puede estudiar rebajar el periodo de supervisión de 10 años, pero se ha preguntado “qué hacemos aumentado la obligación de la frecuencia cuando los plazos no se cumplen porque hay edificaciones que se abandonan por quienes las ocupan ilegalmente”. Desde su punto de vista, rebajar el periodo de revisión “no serviría para nada en la zona de Pignatelli”. “Tener o no la ITE es obligación de los propietarios y los Ayuntamientos inspeccionar el parque edificatorio”, ha diferenciado.