'La Zaragoza de las mujeres', un libro para conocer la historia de la ciudad con perspectiva de género

“Rendir homenaje a las mujeres que han sido protagonistas históricas en diversos ámbitos y recuperar la memoria de las menos conocidas, con sus nombres propios o su colectivo”. Ese es el objetivo del nuevo libro La Zaragoza de las mujeres, editado por el Servicio de Igualdad del Ayuntamiento de Zaragoza, que esta semana presentó la concejala de Educación e Inclusión, Arantza Gracia, junto a las autoras Carmen Romeo, Gloria Álvarez, Cristina Baselga, Concha Gaudó e Inocencia Torres y la diseñadora Aurora Verón.

La iniciativa se enmarca en una de las peticiones recogidas en el II Plan de Igualdad de la ciudad de Zaragoza 2018-2021: la visibilización pública de las mujeres, en este caso a través de la denominación de calles. Converge además con la estrategia Ciudad Educadora, también impulsada desde la Concejalía de Educación e Inclusión, que concibe cada espacio público como un recurso pedagógico.

Para ello, el Ayuntamiento ha decidido editar la segunda edición de este libro, que actualiza la pionera iniciativa publicada en 2010. En realidad, explican, “el libro no es solo un callejero, sino un estudio que da a conocer las biografías de estas mujeres y que tiene un gran valor para observar el desarrollo urbanístico y social de la ciudad”.

Este trabajo muestra que en los últimos años se ha incrementado en un 35 % el número de calles con nombre de mujer, pasando de 170 a 229. No obstante, en el callejero zaragozano sigue existiendo una notable brecha de género. De las 3.230 calles registradas oficialmente, 1.463 llevan nombre de personas concretas y, de estas, 1.234 tienen nombre de varón (84 %) y 229 de mujer (16 %), de las cuales 41 son santas. Del resto de los topónimos (1.667) solo 142 están en femenino (oficios, monasterios, advocaciones de la Virgen...).

La Zaragoza de las mujeres es “un exhaustivo trabajo de recopilación e investigación de 207 páginas que recoge las calles que en la ciudad llevan nombre de mujer, incluidas algunas de las que en otro tiempo hubo y que hoy están desaparecidas. Así, por una parte quiere llamar la atención sobre la cantidad de mujeres librepensantes que, habiendo realizado una contribución a la sociedad de calidad indudable y presentando una trayectoria modélica, siguen sin tener espacio en las calles de Zaragoza. Y, al mismo tiempo, pone en valor la importancia de las mujeres que sí están nombradas en ellas”.