La Consejería de Salud establecerá el uso obligatorio de la mascarilla en todos los centros sanitarios y en las farmacias de Asturias desde este martes 9 de enero. Una medida que se mantendrá en vigor al menos, dos semanas, plazo en el que se estima que habrá una alta circulación de virus respiratorios.
Esta decisión permitirá reducir la transmisión de estas enfermedades y proteger tanto a las personas más vulnerables como a quienes trabajan en los centros donde se implantará el uso de la mascarilla.
La consejera de Salud, Concepción Saavedra, lo ha anunciado después de la reunión del Consejo Interterritorial de Salud, que ha aplazado posicionarse ante este asunto hasta el próximo miércoles ante la falta de consenso entre las comunidades autónomas. “Tomamos esta decisión en un acto de responsabilidad porque tenemos una población muy envejecida, que es muy vulnerable, y en Asturias estamos en un momento de alta circulación de este tipo de virus que prevemos se va a extender al menos dos semanas más y no debemos demorarla”, ha explicado.
“Hoy por hoy tenemos una capacidad más que aceptable para dar una respuesta de calidad a las demandas de salud de la población sin necesidad de tomar medidas extraordinarias como las de suspender la cirugía programada, y vamos a hacer lo que consideramos más adecuado para que esto siga siendo así”, ha añadido.
Asturias acudía a la reunión con el Ministerio de este lunes con la intención de acatar la medida que se consensuase en el encuentro. Ante la falta de acuerdo y el hecho de que el Ministerio ha pospuesto al miércoles una decisión definitiva, y ha dejado en manos de las comunidades autónomas las medidas a tomar, Saavedra ha anunciado la posición del Principado. Ya hace dos semanas que desde Salud se había recomendado el uso de mascarilla en caso de estar bajo la influencia de algún virus respiratorio.
No hay que olvidar que este lunes se ha recuperado la actividad lectiva en los centros escolares después de las vacaciones navideñas, una circunstancia que hace que aumente la circulación de virus y puede poner en peligro el funcionamiento normal de la asistencia sanitaria.