La Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) ve con “preocupación” la desaparición de los pequeños comercios regentados por autónomos en el Principado de Asturias, donde se perdieron el pasado año más de 500.
“El pequeño comercio se muere lentamente en Asturias”, ha asegurado el presidente de la UPTA, Eduardo Abad, que ha calificado de “crítica” la situación del sector en la región después de que en el primer semestre se haya reducido en 160 los autónomos afiliados a la Seguridad Social, más del 60 por ciento de ellos del sector del pequeño comercio.
“Estamos hablando de una cantidad muy abultada si se tiene en cuenta que, de los 71.000 autónomos que hay en Asturias, el comercio solo ocupa un 40 por ciento”, ha explicado Abad, crítico con las grandes superficies y con el envejecimiento del tejido productivo de la región ya que hay más de 6.000 autónomos con más de 60 años y 3.000 con más de 63.
La UPTA ha pedido una reunión “urgente” al Gobierno de Asturias para “acometer una verdadera transformación del tejido productivo a favor del relevo generacional” y para que “recupere las competencias en materia de comercio interior” y así ser el Principado quien decida en temas como las fechas de las rebajas, además de establecer los horarios comerciales.
“El mercado del consumo ha quedado prácticamente en manos de las grandes superficies, quienes marcan sus horarios y la temporada de rebajas en unas condiciones contra las que los pequeños comercios no pueden competir”, ha señalado Abad, que ve “preocupante” la desaparición de estos negocios en pueblos que pueden verse privados de servicios esenciales.
Entre los datos presentados este miércoles, Abad ha querido subrayar el de los “falsos autónomos”, esos trabajadores por cuenta propia que son contratados por empresas de forma “alegal” y trabajan como si fueran asalariados pero que cuentan como autónomos.
Según el presidente de UPTA, ente, en Asturias hay más de 5.000 falsos autónomos que “ayudan” a que “los empresarios se ahorren todos los costes sociales y tengan extraordinarios resultados económicos”.
“Hay sanitarios cobrando 1.000 euros siendo autónomos y trabajando en clínicas privadas, quienes a su vez han subido sus resultados económicos en este primer semestre del año un 26 por ciento”, ha criticado el presidente de UPTA, quien considera esta situación “denunciable” por parte de los colegios profesionales.