Investigador Ramón y Cajal del CSIC desde 2020, Miguel es un ecólogo evolutivo computacional que ha retornado a la Estación Biológica de Doñana (Sevilla) después de formarse en centros de investigación internacionales, primero en Leipzig (Alemania) y Helsinki (Finlandia) como complemento a su doctorado, y después como estudiante postdoctoral en las Universidades de Princeton (USA), y Zurich (Suiza). Actualmente lidera el grupo de Biología Computacional con el objetivo es entender la evolución recíproca entre los enemigos naturales de las bacterias (virus bacteriófagos o “fagos”) y sus hospedadores para poder así contribuir al uso futuro de estos virus como agentes terapéuticos en la lucha contra la resistencia bacteriana a los antibióticos.
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