Unas 30.000 personas reciben nuestro apoyo en la primera semana tras el terremoto en Nepal

Ha pasado poco más de una semana desde que el peor terremoto que ha sacudido Nepal en los últimos 80 años hiciera acto de presencia y la emergencia continúa. Tras de sí ha dejado un reguero de cifras que desvelan una tragedia humana inmensa y un escenario devastador: más de 7.600 vidas, más de 16.000 heridos y, según la ONU, más de 8 millones de personas directamente afectadas, de las cuales casi 3 millones han perdido sus hogares. Las tareas de rescate continúan  ­-aunque la esperanza de encontrar supervivientes entre los escombros es ya prácticamente nula-, así como la identificación y búsqueda de personas desaparecidas y la reunificación de familias. Mientras, continúa la distribución de artículos de primera necesidad, comida, mantas, colchonetas y lonas impermeables, medicamentos y kits de higiene entre la población afectada. La Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas (OCHA) ha alertado de que hay más de 3,5 millones personas con necesidades alimenticias en Nepal, 1,4 millones con carácter inmediato, y 4,2 millones necesitan acceso a agua, servicios sanitarios y medicamentos de forma urgente.

Ayuda en Acción trabaja en Nepal desde 1984 a través de su socio internacional ActionAid. Estamos en terreno distribuyendo artículos de primera necesidad desde el pasado martes 28 de abril –comida, mantas, colchonetas y lonas impermeables, medicamentos y kits de higiene-, priorizando el reparto en las zonas más afectadas donde aún no ha llegado la ayuda humanitaria. Trabajamos junto a las comunidades para asegurarnos de saber qué es lo que necesitan con mayor urgencia, especialmente los niños y las mujeres, la población más vulnerable en un desastre natural. Estamos también dando apoyo en los campamentos que acogen a la población afectada, como el montado en el descampado de Tundhikel, cerca de la plaza Darbar de Katmandú. Nuestros equipos locales activaron y desplegaron los dispositivos de emergencia el pasado domingo y han sido reforzados con el desplazamiento de expertos en ayuda humanitaria, pues la coordinación con el gobierno nepalí, la ONU y el resto de organizaciones sociales en terreno es fundamental para que la ayuda se reparta de la manera más efectiva y allí donde sea más necesario. 

Desde Katmandú, el director de ActionAid Nepal, Bimal Phunyal, alerta de que “las necesidades de la población tienen una escala impredecible; las vidas de las personas afectadas han dado un giro, muchas están sin hogar, hambrientas y desesperadas. Necesitamos apoyo urgente para poder seguir desplegando una ayuda vital para Nepal”.

El 40% del país está afectado y la situación es crítica en zonas rurales cercanas al epicentro, de difícil acceso, donde 9 de cada 10 personas han perdido sus hogares y su modo de vida, especialmente ganado, sin posibilidad de acceder a alimentos por sus propios medios, como sucede en Badhikel, distrito de Lalitpur, donde más de 6.000 personas ya han recibido el apoyo de Ayuda en Acción y ActionAid, o la zona de Sindhupalchok, uno de los distritos más devastados, donde  4.200 familias (aproximadamente 22.000 personas) recibieron el pasado fin de semana comida (principalmente arroz, lentejas y sal), kits de higiene compuestos por guantes desechables, jabón, gasas y tiritas, algodón, lejía, compresas, sales de rehidratación y antibióticos, y mantas, lonas y colchonetas impermeables. Al finalizar esta semana, esperamos haber llegado a unas 80.000 personas afectadas que luchan por salir adelante.

Ayuda en Acción ha activado distintos canales de colaboración para apoyar la emergencia en Nepal. Puedes apoyar esta emergencia en la web de Ayuda en Acción, a través del teléfono gratuito 900 85 85 88 y enviando un SMS con RESPONDE NEPAL al 28014 (1,20€) o al 38014 (6€).

 

Ha pasado poco más de una semana desde que el peor terremoto que ha sacudido Nepal en los últimos 80 años hiciera acto de presencia y la emergencia continúa. Tras de sí ha dejado un reguero de cifras que desvelan una tragedia humana inmensa y un escenario devastador: más de 7.600 vidas, más de 16.000 heridos y, según la ONU, más de 8 millones de personas directamente afectadas, de las cuales casi 3 millones han perdido sus hogares. Las tareas de rescate continúan  ­-aunque la esperanza de encontrar supervivientes entre los escombros es ya prácticamente nula-, así como la identificación y búsqueda de personas desaparecidas y la reunificación de familias. Mientras, continúa la distribución de artículos de primera necesidad, comida, mantas, colchonetas y lonas impermeables, medicamentos y kits de higiene entre la población afectada. La Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas (OCHA) ha alertado de que hay más de 3,5 millones personas con necesidades alimenticias en Nepal, 1,4 millones con carácter inmediato, y 4,2 millones necesitan acceso a agua, servicios sanitarios y medicamentos de forma urgente.