El año pasado, el personal del Ayuntamiento de Bilbao metió un total de 17.622 horas extra, lo que partiendo del convenio actual equivaldría a aproximadamente 11 puestos de trabajo adicionales. Si bien es verdad que algunas de ellas parecen inevitables, como las intervenciones de urgencia de los trabajadores de mantenimiento o una salida de la ambulancia fuera de horas, tal cantidad de tiempo adicional llama la atención. Resulta especialmente destacable el caso de la policía municipal: Desempeñó 10.290 horas, más de la mitad del total y su sindicato mayoritario, ELA, denuncia la falta de efectivos para cubrir el servicio ordinario.
Los datos de horas extra figuran en la respuesta que ha dado el equipo de gobierno a una pregunta del grupo EH Bildu. En la misma se detalla que la mayor parte de las horas tuvo que realizarlas la policía, 4.423 de ellas durante la Aste Nagusia, el segundo área con mayor tiempo de trabajo adicional son los bomberos, con 2.835, y en tercer lugar está Obras y Servicios, con 1.426.
En otra consulta realizada al consistorio, la coalición independentista se interesó por el número de plazas amortizadas por jubilaciones o renuncias de cara a este año. La réplica resulta esclarecedora. El Ayuntamiento explica que en estricto cumplimiento de las medidas para el cumplimiento del déficit impuestas por el Gobierno central, el año pasado sólo se contrató a trabajadores de Emergencias, puestos que de estar vacíos no permitirían el desempeño del servicio público y otros casos excepcionales como los encargados de la apertura y vigilancia de colegios públicos.
El año pasado hubo un total de 27 jubilaciones y otras 26 personas renunciaron a su plaza por diversos motivos, sólo una pequeña parte fueron reemplazados. El equipo de gobierno detalla que “la necesidad de ajuste del Capítulo I de Personal para el presupuesto del año 2013 conlleva la amortización de plazas de plantilla, lo que a su vez implica una supresión de vacantes estructurales de la Relación de Puestos de Trabajo”. Lo cual quiere decir que de cara a este año se han suprimido definitivamente un total de 39 plazas municipales “excedentarias”.
Diez de estos puestos de trabajo se han eliminado en el cuerpo de Bomberos: Dos suboficiales, cuatro sargentos, dos bomberos de intervención y otros dos efectivos de transmisión de comunicaciones. Resulta especialmente chocante que se eliminen dos puestos de intervención y otros dos en comunicaciones cuando el propio equipo de gobierno detalla que son precisamente estas plazas las que estaría justificado sustituir, incluso cumpliendo lo estipulado por los requisitos de Rajoy. Y más aún si se tiene en cuenta que es precisamente en este área donde se realizan la segunda mayor cantidad de horas extra. Concretamente 2.835, o el equivalente aproximado a dos trabajadores adicionales.
Desde el punto de vista de Pedro, portavoz del sindicato ELA en la policía municipal, la razón para tal cantidad de tiempo de trabajo adicional es “que cada vez somos menos y cada vez tenemos más funciones”. La central a la que pertenece está “completamente en contra de las horas extra” y denuncia la falta de efectivos en el cuerpo. “Llevamos dos o tres años sin que se convoquen nuevas promociones, las jubilaciones no se sustituyen y las bajas permanentes tampoco”, apunta. Una situación que les obliga a trabajar por encima del tiempo estipulado en sus convenios para cumplir con las necesidades del servicio ordinario.
En algunos casos, como las celebraciones de la semana grande bilbaína, realizar cierta cantidad de horas extra debido a actuaciones inesperadas parece inevitable. “Eso depende de la planificación y de la gestión que se haga de los recursos”, puntualiza Pedro. “Pero si no hay gente suficiente, estaremos obligados a meter horas”, añade. En su opinión, cuantos más agentes haya en la calle “mejor será la calidad del servicio”.