Edelrid es una marca alemana de referencia en el mercado de montaña fundada en 1863 por Julius Edelmann y Carl Ridder, de cuyos apellidos coge su nombre. Desde su fundación, se ha caracterizado por ser en una firma especializada en la fabricación de cuerdas, tal es así que en los años 50 se convertía en la primera marca del sector que desarrollaba una cuerda trenzada para escalada.
Ya en los años 60, Edelrid alcanzaba un nuevo hito al desarrollar una cuerda que podía soportar varias caídas, convirtiéndose en la génesis de las cuerdas actuales. Desde entonces, Edelrid se ha caracterizado por el desarrollo tecnológico y embarcarse en una continua búsqueda y evolución en sus productos. Prueba de ello es la cuerda Swift Protect Pro Dry de 8.9mm que nos ocupa en este test. Así que, empecemos a hablar de ella...
Uso de aramida y poliamida
La Swift Protect Pro Dry es una cuerda dinámica de 8.9mm de diámetro direccionada principalmente al alpinismo, escalada en hielo y escalada en pared, aunque también juega un excelente papel como cuerda para escalada deportiva, aunque las recomendaciones de la marca van más hacia las actividades alpinas.
Destacar que estamos ante una cuerda que lleva en su composición parte de aramida, lo que le proporciona una resistencia al corte muy elevada, pero a pesar de la existencia de este componente tan recio, y poco dinámico, la cuerda sigue manteniendo unos datos de dinamismo muy buenos y dentro de los estándares necesarios.
El desarrollo tecnológico que ha implementado Edelrid en este modelo nos ha parecido simplemente espectacular. Las fibras de aramida se integran en el trenzado de la camisa, dando una resistencia mucho mayor al corte que la poliamida. Lo espectacular es conseguir que algo tan estático como la aramida se integre tan bien en la cuerda reforzándola frente al corte y, que a su vez, mantenga las propiedades dinámicas necesarias para una cuerda de este tipo.
Característica
Los datos técnicos de la cuerda son muy buenos, tanto en uso en simple, como doble o gemela.
Diámetro: 8,90 mm.
Elongación dinámica: 29 / 26 /25 %.
Fuerza de choque: 9,9 / 7,3 / 11,8 kN.
Proporción del núcleo: 64 %.
Proporción de la funda: 36 %.
Peso: 53 g/m.
Elongación estática: 5,5 / 5,2 / 3,5 %.
Número de caídas de factor 2: 6 / 18 / 30.
Certificación: EN 892.
Fabricado en: Alemania.
Materiales: poliamida y aramida.
Certificación multitipo: sí.
Antiaristas: sí.
Tipo de cuerda: dinámica.
Marcado de mitad de cuerda: sí.
Impregnación: sí.
Tratamientos
En su uso en pared, nos encontramos con una cuerda un poco cable en comparación con otros modelos de la marca. Esa cierta rigidez es debida a ese tratamiento antiaristas tan recio. Sin embargo, también es cierto que cambio mil veces un poco de maleabilidad por un plus de este tipo, sobre todo ante una posible caída sobre un borde cortante.
También es de reseñar que los nudos se hacen fácilmente y se deshacen igualmente con sencillez, incluso después de una caída o colgar un segundo pesado. Los nudos autoblocantes (Marchard, Prusik, etc.) funcionan a la perfección sobre la cuerda.
Otro punto a tener en cuenta es el tratamiento Pro Dry, que otorga a la cuerda una capacidad de absorción de agua inferior al 2%, lo que hace que no se moje y pese como un coche y, obviamente, evita que después se congele y sea inmanejable. Este tratamiento lo hemos podido comprobar en numerosas ocasiones y el funcionamiento en la vida inicial de las cuerdas es mucho mayor. Es cierto que, según van envejeciendo, esos tratamientos van perdiendo eficacia, pero podemos afirmar que en las cuerdas de Edelrid la durabilidad de estos tratamientos es la mayor de todas las marcas que hemos probado.
En definitiva, creemos que la Swift Protect Pro Dry de 8.9mm es una cuerda ligera, pero también muy recia y resistente, con un dinamismo en las caídas muy notable y un diámetro muy contenido. Nos parece un producto excepcional para alpinismo y vías de pared donde necesitemos un equilibrio entre peso/resistencia y seguridad. Sin duda, una cuerda muy alpina que llevaríamos a Ordesa, Los Galayos, Alpes o hasta el fin del mundo...