La primera prueba de los Mundiales de Esquí de Montaña 2017 se disputó en Val Salatis, en un cerrado valle situado a unos 10 kilómetros de la localidad de Tambre. La niebla y la humedad domianron toda la prueba dificultado en muchos casos la progresión de los atletas. La prueba contó con la participación de 75 hombres y 49 mujeres de 25 naciones diferentes.
En categoría masculina se impuso el italiano Damiano Lenzi quien lideró gran parte de la carrera. Lenzi cruzó la línea de meta con los brazos en alto, y con la satisfacción de ganar cuando se corre en casa. Kilian Jornet entró a pocos segundos del italiano: “Hoy ha sido una de esas carreras en las que piensas: hoy no es el día, cuando no eran las pieles, eran las fijaciones, cuando no eran los esquís”. A pesar de las dificultades Jornet y Lenzi llegaban juntos a la última bajada en una emocionante mano a mano en el que finalmente se impuso el italiano. El tercero en el podio fue el alemán Antón Palzer, quien llegaba a meta claramente emocionado. Oriol Cardona se subía también al segundo escalón del podio de la categoría promesa. El pequeño de los Cardona completaba el circuito en poco más de dos horas. Un tiempo que le convierte en el nuevo subcampeón del mundo promesa en modalidad Individual. Tan solo un unos minutos más tarde completaban el recorrido Nil Cardona (21), Marc Pinsach (25) y Antonio Alcalde (32) quien además se hacía con al sexta posición de la clasificación promesa. Joan Reyné se vio obligado a abandonar tras la primera subida a causa de un fuerte dolor muscular. En referencia al recorrido todos los corredores han coincidido en que se trataba de una prueba muy exigente, no solo por el estado de la nieve sino también por la falta de visibilidad en las cotas más altas. Un hecho que obligaba a extremar las precauciones, especialmente en las bajadas.
En féminas, Laetitia Roux volvía a vencer. La francesa salía con mucha fuerza y se hacía con la cabeza de carrera rápidamente, una posición que mantenía hasta el final de la Individual. Tras la entrada triunfal de Roux entraba en meta la suiza Maude Mathys a dos minutos de la primera. La tercera en el podio fue la compañera de selección de Roux: Axelle Mollaret. Frosberg entraba cuarta y Fiecher quinta. La sexta era Mireia Miró a escasos 8 minutos de Roux quien conseguía el mejor resultado femenino para la selección: “Sentía que iba muy lenta, pero en estas condiciones es mejor ser prudente” , sentenciaba la catalana. Clàudia Galicia se hacía con la séptima posición, su resultado más discreto en lo que llevamos de temporad,a pero con buen sabor de boca tras finalizar la exigente prueba Individual. Marta García y Marta Riba finalizaban también la exigente primera prueba de estos mundiales en décimo séptima y vigésimo cuarta posición. Ana Alonso sufría una caída en una de las primera bajadas que la obligó, muy a su pesar, a abandonar la prueba: “La visibilidad era muy mala en cotas altas, avanzabas de bandera en bandera porque era imposible ver más allá”, explicaba la andaluza.
Individual de Juniors y Cadetes
Segundo día de mundiales en Alpago. Sol, buenas temperaturas y una nieve nada amable para la competición de la prueba Individual de Juniors y Cadetes.
Júlia Casanovas se hacía con el bronce en la Individual Junior en una carrera que se caracterizó por un alto nivel técnico especialmente por el tipo de nieve y alto nivel de las competidoras. En el primer cambio Júlia se situaba entre las seis primeras, tras un par de acertados adelantamientos en plano y una buena primera bajada. Poco a poco iba acortando distancias y ganando posiciones hasta conseguir el bronce en su categoría. “Me ha pasado de todo lo que te puede pasar en una carrera, me he caído, me han saltado los esquís… he cometido muchos errores, pero estoy muy contenta con el resultado”. Y no es para menos, la esquiadora catalana completaba el recorrido en menos de una hora y media consiguiendo el bronce en un carrera con el máximo nivel competitivo de los últimos dos años. La italiana Giulia Murada y la rusa Ekaterina Osichkina se hacían con el oro y la plata de la Individual Junior tras completar el recorrido en un tiempo de 1:23 y 1:24 respectivamente.
Aribau Portillo y Pau Coll cruzaban el arco de meta uno detrás del otro haciéndose con la décima cuarta y la décima quinta posición. Aribau hizo una buena carrera con alguna que otra dificultad: “Se me ha salido una de las pieles llegando al final de una de las subidas. Ha sido un momento un poco crítico que me ha hecho perder bastante tiempo”. Pau Coll ha acabado con muy buenas sensaciones también: “El recorrido era muy técnico. Me hubiera gustado poder poner una marcha más. Al final he acabado muy cansado de brazos ya que resbalaba todo mucho y tenía que hacer uso de los bastones, aun así me lo he pasado muy bien, el recorrido era muy divertido”. El podio Junior masculino estuvo copado por los deportistas italianos Davide Magnini, Nicolo Ernesto y Enrico Loss.
La corredora aragonesa Claudia Valero se hacía con una quinta plaza en la Individual de cadetes colándose en el Top 5 de su categoría, nada mal si tenemos en cuenta que es la primera vez que esta jovencísima esquiadora competía en una prueba de carácter internacional. “He tenido un par de caídas pero he disfrutado un montón, tanto por el recorrido como por el espectacular paisaje. Estoy muy contenta con el resultado teniendo en cuenta que son mis primeros mundiales”. La francesa Justine Tonso, la italiana Samanatha Bertolina y la Suiza Caroline Ulrish se subían al podio en la carrera femenina de Cadetes
En la carrera masculina de Cadetes, Txomin Ortiz y Rafa Urbizu cruzaban la línea de meta uno detrás del otro a escasos dos minutos de diferencia. Ortiz se hacía con la décima segunda posición tras completar el recorrido en 1 hora 25 minutos mientras que su compañero vasco Rafa Urbizo conseguía la décima tercera con un tiempo de 1 hora 27 minutos. Dos suizos y un italiano completaban el podio de Cadetes. Aurélien Gay era el nuevo campeón, Léo Besson, el subcampeón, y Alessandro Rossi, el bronce.