La canaria Carla Suárez Navarro celebró su pase a la segunda ronda del Abierto de Estados Unidos de tenis tras debutar en un partido en el que se sintió “más tranquila” pero en el que echó en falta “una marcha más”.
“Me siento más tranquila en la pista (pero) sí he echado en falta una marcha más de piernas, yo creo que mi cuerpo no respondía a lo que mi cabeza estaba mandando”, dijo Suárez a los periodistas tras su victoria.
La tenista española admitió que le gustaría recuperar un poco la “agresividad, constancia y solidez” que tenía en el pasado, porque al final “no es fácil” reconocer “que llevaba tres años arriba, y que ahora falta un poco”.
“El nivel de tenis no creo que sea, porque desde hace mucho tiempo que lo tengo, pero antes era una jugadora peligrosa cuando sabía combinar bien las dos cosas, y eso es lo que a día de hoy me falta un poquito, porque mis partidos son irregulares”, añadió la grancanaria.
Suárez, que debutó con victoria en su partido de la primera ronda contra la turca Ipek Soylu por 6-4 y 6-2, en 1 hora y 13 minutos, reconoció que aunque estuvo tranquila pensó que iba a jugar “un poquito mejor”.
“En ningún momento me he encontrado bien del todo, pero a la misma vez he tenido la seguridad de que era difícil que el partido se me complicara”, concluyó.
Suárez Navarro se enfrentará en el partido de segunda ronda a la croata Mirjana Lucic-Baroni, vigésimo novena favorita del torneo, quien previamente venció a la puertorriqueña Mónica Puig por 6-4, 6-7 (4) y 7-6 (4).