El presidente de la Unión Deportiva Las Palmas, Miguel Ángel Ramírez, ha acusado al Sevilla de actuar con “mala fe” en el “caso Vitolo”, por no haber abonado aún a su club el 12,5 % acordado en su día en el caso de que el futbolista recalara en otro equipo, como ha sucedido este verano al ficharlo el Atlético de Madrid.
El dirigente isleño ha dicho en rueda de prensa que el club de Nervión intentó incluso que no se pudiera tramitar la ficha del jugador internacional, quien milita en Las Palmas hasta diciembre de este año antes de incorporarse en enero de 2018 al conjunto madrileño, una vez haya cumplido éste la sanción que le impide inscribir futbolistas.
Ramírez ha insistido en que defenderá los intereses del club grancanario “hasta donde sea necesario” y ha culpado de este litigio al actual presidente del Sevilla, José Castro, porque, a su juicio, está “poniendo en peligro” las relaciones entre los dos clubes.
También ha asegurado que a la UD Las Palmas no ha llegado “ninguna demanda que decían que iban a iniciar desde el Sevilla”, y lo que han solicitado a LaLiga es “el arbitraje para definir las diferencias” que puedan tener en el contrato de 2013, cuando Vitolo fue traspasado por el equipo canario al andaluz.
El presidente de Las Palmas subraya que hay “un proceder ajustado totalmente al derecho”, y que no han cometido “ninguna ilegalidad”, algo que explicarán en los tribunales si fuese necesario.
“A pesar de que el Sevilla pretendió que no pudiésemos tramitar la ficha de Vitolo, él ya ha jugado y es futbolista de la UD Las Palmas”, ha apostillado Ramírez.
Además, ha lamentado que no se haya buscado una “solución” para cobrar el dinero pendiente -casi cuatro millones y medio de euros-, sino que desde el Sevilla se haya recurrido a la vía judicial.
“Ha habido un retraso malicioso para que no tuviéramos más recursos para hacer una mejor plantilla, y eso la UEFA lo sabe, pero es el Sevilla quien corre el riesgo de que se le pueda suspender y no pueda fichar la próxima temporada. Ellos sabrán...”, ha indicado Ramírez.
El dirigente isleño insiste en que la Unión Deportiva debe cobrar el 12,5 por ciento “de cualquier modalidad de traspaso de la salida de Vitolo”, quien se desligó del Sevilla mediante el pago de 35,7 millones de euros de su cláusula de rescisión de contrato.
“Se ha hecho todo como se ha pactado y es el Sevilla el que no ha cumplido. Es el señor Pepe Castro quien, con esta actitud, está poniendo en peligro una relación, pero entiendo que esté presionado por el sevillismo”, ha explicado Ramírez, aunque matiza que su homólogo de Nervión “no puede defender los derechos del Sevilla pisoteando los de la UD Las Palmas”.