El Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) ha admitido a trámite la reclamación de los regatistas grancanarios Onán Barreiros y Juan Curbelo contra la decisión de la Federación de Vela que los excluyó del equipo olímpico que representará a España en los Juegos de Río.
En un comunicado, Barreiros y Curbelo han recordado que defienden su derecho a participar en la cita olímpica porque forman la única tripulación de la clase 470 que cumple los requisitos mínimos exigidos por la guía de selección olímpica de la propia RFEV.
Barrerios y Curbelo decidieron acudir al TAS ante la negativa de la RFEV a tramitar su reclamación como única instancia que puede resolverla a tiempo, al contrario que la justicia ordinaria.
En esa línea, los regatistas isleños recuerdan que los Juegos de Río comenzarán el próximo 8 de agosto y que los plazos para recurrir la decisión de la RFEV son ya ajustados.
Por este motivo, estos dos regatistas, que ocupan el quinto lugar en el ránking mundial de 470, solicitaron al TAS que su reclamación se tramitara con carácter de urgencia.
Barreiros y Curbelo destacan que la RFEV se opuso ante el mismo Tribunal, con lo que dilata la decisión, pues una petición de tramitación por la vía de urgencia ante el TAS solo se puede admitir si las dos partes están de acuerdo.
Los regatistas insisten en que forman la única tripulación de la clase 470 española que cumple con los requisitos mínimos para la selección olímpica establecidos por la RFEV, que exigen quedar entre los diez primeros países en las dos regatas de selección.
La tripulación canaria cumplió con este resultado mínimo en las dos regatas de selección que, para la clase 470, fueron el Mundial de Argentina y el Europeo de Mallorca; sin embargo, la RFEV designó a la pareja catalana Xammar-Herp como representantes en Río “pese a que no cumplió el criterio mínimo” en la cita argentina, destaca la nota.
Tras negarse la RFEV a tramitar la reclamación de los regatistas canarios, estos optaron por acudir por su cuenta a la Copa del Mundo de Hyeres (Francia), prevista como regata de desempate por la guía.
Pese a acudir sin apoyos y pagar el viaje con una campaña de micromecenazgo por internet, Barreiros y Curbelo fueron la única tripulación española que logró entrar en la regata por las medallas, en la que quedaron séptimos (y primeros españoles).