Carla Suárez Navarro volvió a toparse con un muro llamado Serena Williams y se despidió del torneo de Wimbledon tras caer por 6-2 y 6-2, en octavos de final, ante la heptcampeona en Londres. La tenista canaria no consigue mejorar su mejor marca en el All England Club, aunque sale reforzada de la cita británica con la mejora de dos puestos en la clasificación mundial hasta el 29.
La menor de las Williams sigue viva en la búsqueda del vigésimo cuarto major que le iguale con la australiana Margaret Court como la tenista en la historia con más entorchados de esta categoría. Y sigue en la pelea por seguir engordando su palmarés porque se impuso a una Carla Suárez que venía lanzada después de tres triunfos contundentes.
Siempre alejada de las grandes pistas, Carla hizo su debut en la pista 1 del All England Club ante la gran dominadora del tenis mundial en este siglo. La grancanaria hizo sufrir a Serena cuando el punto se alargaba varios golpes, pero adolecía de soluciones cuando la estadounidense atacaba su segundo servicio, consiguiendo ahí un buen puñado de golpes ganadores.
Una rotura inicial colocó a Serena al frente, que refrendó la ventaja con un segundo break para apuntarse el parcial por 6-2. La estadounidense repitió guion en el segundo set y quebró a Carla de inicio para evitar cualquier tipo de sorpresa.
En una hora y cinco minutos Serena confirmó su séptimo triunfo ante la grancanaria y se plantó en cuartos de final de Wimbledon por segundo año consecutivo, donde se medirá a su compatriota Alison Riske, que venció a la número uno del mundo, la australiana Ashleigh Barty.
Para Carla, esta derrota supone que no se colocará por primera vez en cuatro años como la primera raqueta española. Los puntos sumados en Wimbledon unidos a la temprana eliminación de Garbiñe Muguruza dejan a Carla a 23 de la natural de Caracas en la clasificación WTA. Muguruza, que se fue de Wimbledon en primera ronda, será el próximo lunes vigésimo octava en el ránking, justo por delante de la grancanaria.