El entrenador de la UD Las Palmas, Pepe Mel, ha manifestado que su equipo está “cogido con alfileres” por las numerosas bajas, pero tratarán de “competir” y “ponérselo muy difícil” al Deportivo de La Coruña, este sábado en el estadio de Riazor, en la jornada 26 de LaLiga SmartBank.
Pese a las dificultades -“vamos los que tenemos, con trece fichas profesionales”-, el técnico amarillo ha dicho en rueda de prensa que alineará “a las mejores piezas” y que irán “con ilusión” para mantenerse cerca de las “posiciones de privilegio” de la clasificación, a un solo punto de la zona de promoción de ascenso.
“No quiero que nadie piense que si perdemos no pasa nada. La UD Las Palmas es un club ganador, yo quiero estar arriba en la clasificación y les debemos muchas alegrías a nuestros aficionados”, ha apuntado en una de sus intervenciones.
Del Deportivo, al que conoce sobradamente pues ocupó su banquillo en la máxima categoría, Mel ha indicado que se ha reforzado bien en el mercado de invierno, y que ahora atraviesa una buena dinámica de resultados, con cinco victorias consecutivas, y cuatro de ellas con Fernando Vázquez como nuevo inquilino del banquillo.
“Las dinámicas en el fútbol son muy importantes, y aunque no hagas el mejor partido, puedes vencer, como hizo el Deportivo en Albacete, donde nunca debió ganar, pero ahora le sale todo bien”, ha explicado sobre la reacción del conjunto coruñés.
Además, Mel ha trabajado durante esta semana la forma de contrarrestar el nuevo sistema que emplea su rival, con tres centrales y acumulación de jugadores en el centro del campo.
“Nos adaptaremos a la gente que tenemos, cada semana es una aventura encarar los partidos. Seguramente la clave estará en el centro del campo, ya lo hemos trabajado, e intentaremos presentarle un partido complicado con las piezas que tengamos, pero no puedo inventarme futbolistas”, ha apuntado.
Mel, a pesar de las numerosas bajas, está convencido de que si sus jugadores están “al cien por cien”, harán “sufrir” al Deportivo.
El preparador madrileño se ha referido también a su pasado en el club albiazul, y ha recordado que en los ocho meses que duró su “aventura” en el banquillo de Riazor, el Deportivo nunca estuvo en puestos de descenso.
“Fue una etapa difícil, pero muy mal no lo estábamos haciendo, como quedó demostrado con todo lo que pasó después. Le tengo mucho cariño a todos los clubes en los que he estado, y el Deportivo jamás puede bajar a Segunda B, tiene que estar en Primera. Ojalá consiga la permanencia, pero mañana querré que gane la Unión Deportiva y que lo tengan complicado”, concluyó.