Los cuentos de Cardona

Abrimos el primer sobre. Empezamos por el cuento: El héroe que transformó los obstáculos en oportunidades . Para no señalar a otros me pondré a mí mismo de modelo. Mi mandato comenzó mandando a parar las ayudas a domicilio. Demasiado dinero para atender a los pobres. Desde Hacienda me dijeron que eso no podía ser legal. Por eso apreté el primer botón de alarma. Los socialistas no dejaron bien cerrado la gestión privada de los servicios sociales. La empresa pedía más dinero porque había más pobres, más necesidades. Pero, todo tiene un límite. Por eso tuve que llamarle la atención a los ciudadanos: “Hago una llamada a la responsabilidad de estas familias que en ocasiones hacen dejación de sus obligaciones con sus abuelos, sus tíos o con cualquier persona mayor”. Oigo risas al fondo, no estoy bromeando, esas fueron mis palabras delante de los micrófonos, ahí están las hemerotecas.

La gente es muy comodona y no atiende a sus viejitos o a sus discapacitados. Se creen que el ayuntamiento tiene que estar siempre, se toman las ayudas temporales como algo eterno. Yo mismo se lo tengo dicho a mis concejales: el coche oficial sólo será para cuatro años, luego ya veremos. Dije que no había dinero y los periódicos empezaron a publicar el rostro de los pobres. Se demostró que yo tenía razón, esas ayudas debían ser temporales porque a muchos de ellos les quedan dos telediarios. Pero hay que cuidar los telediarios antes del 20 N, y esa imagen quemaba a mi partido. Por eso encontré el dinero que no estaba, así me convertí en el héroe que transformó los obstáculos en oportunidades.

Abrimos el segundo sobre. Leemos: La sinergia de células inteligentes. Este cuento es muy bonito. Saben ustedes que nuestros cuerpos se componen de células. El mío, el de este humilde alcalde también. En mi concepto amplio de la democracia me planteé ¿quién ganó las elecciones? Pues yo. Qué piden los ciudadanos. Pues que el ayuntamiento esté dirigido por Cardona y otras células inteligentes. Por eso decidí contratar a mi cuñada por 60.000 euros como gerente de Limpieza. ¿Ven como yo me implico y cuido a mi familia, y no como esa gente que reciben las ayudas a domicilio y se dejan ir y no cuidan a sus viejitos? Y buscando en el mercado otras células inteligentes encontré a Miguel Ángel Rodríguez, y decidí contratarlo por 95.000 euros como gerente de Guaguas Municipales, un inteligente fórmula para acabar con el agujero del transporte municipal. ¿A qué les gusta este cuento?

El último cuento responde a la pregunta ¿Cuál es tu tesoro? Ese me gustaría que me lo cuenten ustedes. A ver, sí, usted, hable.

--Jefe de Servicio: Alcalde, yo creo que mi tesoro es La Favorita. Es un lugar fantástico porque aunque no reúne las condiciones para trabajar según las sentencias del juzgado de lo social, aunque el gobierno municipal del que usted formó parte lo compró al triple de su valor, aunque hasta el juzgado llegó una cuenta en Suiza y se señaló al empresario Santana Cazorla como el gran beneficiado de la operación, aunque estuvo como intermediario el exportavoz del PP Jorge Rodríguez, aunque ?A pesar de todo eso, usted y su señorito, el señor Soria, están en esta campaña electoral dando lecciones de austeridad, predicando ahorro. Por eso, creo que La Favorita es nuestro tesoro, el tesoro del ayuntamiento. Bueno, en realidad es el tesoro del PP, pero como , según el coaching este , todos somos la misma empresa, yo también siento que La Favorita es mi tesoro, es más, creo que usted debería traer aquí a su señorito para que nos cuente el cuento de La Favorita, entonces sí que valdrían la pena estos ejercicios espirituales. El cuento, por supuesto, vendría en el sobre azul con una gaviota en el sello. Perdón, ¿qué hacen?¿Por qué me echan de la sala??

Colorín colorado, estos cuentos se acabaron...

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Juan Garcia Luján

Abrimos el primer sobre. Empezamos por el cuento: El héroe que transformó los obstáculos en oportunidades . Para no señalar a otros me pondré a mí mismo de modelo. Mi mandato comenzó mandando a parar las ayudas a domicilio. Demasiado dinero para atender a los pobres. Desde Hacienda me dijeron que eso no podía ser legal. Por eso apreté el primer botón de alarma. Los socialistas no dejaron bien cerrado la gestión privada de los servicios sociales. La empresa pedía más dinero porque había más pobres, más necesidades. Pero, todo tiene un límite. Por eso tuve que llamarle la atención a los ciudadanos: “Hago una llamada a la responsabilidad de estas familias que en ocasiones hacen dejación de sus obligaciones con sus abuelos, sus tíos o con cualquier persona mayor”. Oigo risas al fondo, no estoy bromeando, esas fueron mis palabras delante de los micrófonos, ahí están las hemerotecas.

La gente es muy comodona y no atiende a sus viejitos o a sus discapacitados. Se creen que el ayuntamiento tiene que estar siempre, se toman las ayudas temporales como algo eterno. Yo mismo se lo tengo dicho a mis concejales: el coche oficial sólo será para cuatro años, luego ya veremos. Dije que no había dinero y los periódicos empezaron a publicar el rostro de los pobres. Se demostró que yo tenía razón, esas ayudas debían ser temporales porque a muchos de ellos les quedan dos telediarios. Pero hay que cuidar los telediarios antes del 20 N, y esa imagen quemaba a mi partido. Por eso encontré el dinero que no estaba, así me convertí en el héroe que transformó los obstáculos en oportunidades.