Espacio de opinión de Canarias Ahora
Feijóo no es un moderado
Fue salir de la zona de confort gallega y en apenas un mes, a Alberto Nuñez Feijóo se le han saltado todas las costuras del traje de liberal moderado que, durante años, sus estrategas le han ido diseñando con gran acierto, todo sea dicho de paso.
Y es que, desde lo lejos que queda la Xunta y las políticas que allí se llevan a cabo, en el resto del país nos hemos quedado tan solo con una imagen acompañada de titulares telegráficos bien estructurados sobre política nacional.
Pero fue llegar a Madrid y empezar a poner más atención a sus afirmaciones, para darnos cuenta de que Feijóo representa, realmente, al viejo PP de siempre. De la “violencia intrafamiliar” a la mentira de que el Gobierno “se forra” con la subida de la gasolina, Feijóo empieza a mostrar su verdadero perfil: Ultraconservador y profundamente derechista. ¿Empezamos a entender ahora por qué la ultraderecha no tiene representación en Galicia?
En cuestiones como el aborto, Feijóo, en su etapa de Presidente de la Xunta, siempre mostró una cierta ambigüedad ante los medios de comunicación, pero en su gestión no dudó en subvencionar con dinero público a la organización antiabortista Red Madre.
En materia educativa, aprovechó la aprobación de la LOMCE para aumentar la financiación a colegios del Opus Dei que segregan por sexo a los alumnos y que fue declarada ilegal por el Tribunal Supremo. Además, suprimió el programa de gratuidad de libros de texto para la enseñanza obligatoria
En su primer presupuesto como Presidente de la Xunta, en 2009, suprimió la partida del Fondo Extraordinario de Pensiones, dejando a más de 50.000 personas sin pensiones no contributivas en Galicia. Además, revisó a la baja las ayudas a la dependencia provocando que 40.000 dependientes vieran reducidas sus prestaciones y 18.000 dejaran de percibir ayudas directas.
Para rematar, Feijóo impulsó una reforma de la Ley del Suelo y un Plan de Ordenación del Litoral de Galicia que acabó con la protección de la costa gallega y permitió la especulación inmobiliaria, la misma que nos llevó a la crisis de 2008, y el desarrollo de la industria marina intensiva en los espacios de la Red Natura, como en el caso del Cabo Touriñán.
Feijóo, el ya oficialmente líder del PP, llega a Madrid después de trece años al frente de la Xunta y una gestión política bien clara; Un 22,1% de los gallegos vive por debajo del umbral de la pobreza, es decir, más de uno de cada cinco, y se sitúa por primera vez desde 2009 por encima de la media estatal, del 21%, según los datos que se extraen del informe de 2021 sobre la situación de los ciudadanos más vulnerables económicamente, de la “Rede Galega contra a Pobreza”.
El informe pone el foco sobre la situación de los mayores de 65 años. Unas 404.000 personas, 71.0000 más que el año anterior, perciben unas pensiones que están por debajo del umbral de la pobreza. Son el 52,8% de los pensionistas de Galicia, lo que deja a la comunidad como la que tiene un porcentaje más alto de mayores cuyos ingresos no llegan al mínimo de referencia para considerar que no son pobres. Ésta es la alternativa del PP a Pedro Sánchez, la vieja política de siempre con nuevas caras.
Fue salir de la zona de confort gallega y en apenas un mes, a Alberto Nuñez Feijóo se le han saltado todas las costuras del traje de liberal moderado que, durante años, sus estrategas le han ido diseñando con gran acierto, todo sea dicho de paso.
Y es que, desde lo lejos que queda la Xunta y las políticas que allí se llevan a cabo, en el resto del país nos hemos quedado tan solo con una imagen acompañada de titulares telegráficos bien estructurados sobre política nacional.