El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Un artista clásico
El caos lo salvó Elton John. Y su banda, claro. El británico, de sesenta años (en marzo cumple otro más) demostró por qué lleva otros cuarente en la cresta de la ola, cómo respeta al público y cómo se puede estar muy a gusto cantando y tocando el piano ininterrumpidamente durante dos horas y cuarenta minutos sin que nadie parezca un mercenario. El núcleo duro de su banda, formado por el guitarrista Davey Johnstone, el bajista Bob Birch y el batería Nigel Olsson, se presentó en Tenerife reforzado por un portentoso percusionista, John Mahoy, y un efectivo teclista, Guy Bobylon, que le acompañan en todos sus conciertos recientes. El cantante, sentado ante un gran cola, tuvo que esforzarse desde el principio para calentar a un público más preocupado por su integridad física y por escuchar bien que por disfrutar el momento. Todo fue mejorando poco a poco y lo que termina quedando es el buen sabor final.
El caos lo salvó Elton John. Y su banda, claro. El británico, de sesenta años (en marzo cumple otro más) demostró por qué lleva otros cuarente en la cresta de la ola, cómo respeta al público y cómo se puede estar muy a gusto cantando y tocando el piano ininterrumpidamente durante dos horas y cuarenta minutos sin que nadie parezca un mercenario. El núcleo duro de su banda, formado por el guitarrista Davey Johnstone, el bajista Bob Birch y el batería Nigel Olsson, se presentó en Tenerife reforzado por un portentoso percusionista, John Mahoy, y un efectivo teclista, Guy Bobylon, que le acompañan en todos sus conciertos recientes. El cantante, sentado ante un gran cola, tuvo que esforzarse desde el principio para calentar a un público más preocupado por su integridad física y por escuchar bien que por disfrutar el momento. Todo fue mejorando poco a poco y lo que termina quedando es el buen sabor final.