Boda en Meloneras

Ya en Gran Canaria, está cerrándose quien decide si sin galgos o son podencos los que se hipotequen hasta las cejas con la terminación, alicatado hasta el techo y posterior gestión del Palacio de Congresos de Maspalomas. Procuraremos mantenerles informados porque, pese a todo, Lopesan mantiene sus muy particulares pulsos con la Administración, a la que no tiene miedo maldito. Mientras, se da un respiro para las satisfacciones personales porque pronto va a ver cómo se le casa el mayor de sus hijos. Será una boda a lo grande, en el Gran Hotel Costa Meloneras, a mediados de mayo. Felicitamos por adelantado a toda la familia y a sus amigos.

Ya en Gran Canaria, está cerrándose quien decide si sin galgos o son podencos los que se hipotequen hasta las cejas con la terminación, alicatado hasta el techo y posterior gestión del Palacio de Congresos de Maspalomas. Procuraremos mantenerles informados porque, pese a todo, Lopesan mantiene sus muy particulares pulsos con la Administración, a la que no tiene miedo maldito. Mientras, se da un respiro para las satisfacciones personales porque pronto va a ver cómo se le casa el mayor de sus hijos. Será una boda a lo grande, en el Gran Hotel Costa Meloneras, a mediados de mayo. Felicitamos por adelantado a toda la familia y a sus amigos.