Cristina Tavío, de boda

Pero el gozo de Sebastián González se ha ido momentáneamente al pozo porque cuando acudió a presentar los avales ante el órgano correspondiente le advirtieron de que los firmantes deben estar al corriente de sus cuotas, un freno como otro cualquiera para intentar disuadirle. Cuando se entera que el trío Navarro-Meca-Luis Miguel sí dispone del censo de militantes y posiblemente cuentan con los que están al día en las cuotas, ya empieza a oler a pucherazo. Le pide auxilio a Cristina Tavío y ésta le dice que está de boda, aunque luego se la encuentra por una calle santacrucera (¡vivan los novios!). Los reproches mutuos han terminado de complicar la situación en un partido que sigue coleccionando contrariedades en Tenerife.

Pero el gozo de Sebastián González se ha ido momentáneamente al pozo porque cuando acudió a presentar los avales ante el órgano correspondiente le advirtieron de que los firmantes deben estar al corriente de sus cuotas, un freno como otro cualquiera para intentar disuadirle. Cuando se entera que el trío Navarro-Meca-Luis Miguel sí dispone del censo de militantes y posiblemente cuentan con los que están al día en las cuotas, ya empieza a oler a pucherazo. Le pide auxilio a Cristina Tavío y ésta le dice que está de boda, aunque luego se la encuentra por una calle santacrucera (¡vivan los novios!). Los reproches mutuos han terminado de complicar la situación en un partido que sigue coleccionando contrariedades en Tenerife.