La ministra y las poetisas

Le ha tocado el turno en el manual de agravios nacionales del PP a la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, a la que culpan ahora de que en los ocho años de Gobierno de Aznar no se cumpliera con ninguno de los compromisos que ahora se le endosan a la andaluza de modo descarado, en particular, el AVE (María purísima). Pero esa es otra historia que, como todos los tirabuzones del PP, terminará volviéndosele en contra. Lo que nos ocupa aquí es el feliz hallazgo de que Magdalena Álvarez se haya inclinado por los nombres de tres importantes poetisas para bautizar las tres primeras aviones de Salvamento Marítimo que han entrado en funcionamiento en España. Porque, dicho sea con mucho respeto, fue un compromiso del PP que ha tenido que cumplir la actual responsable de Fomento, el de poner a vigilar las aguas territoriales para que no vuelva a darse un colosal disparate como el del Prestige.

Le ha tocado el turno en el manual de agravios nacionales del PP a la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, a la que culpan ahora de que en los ocho años de Gobierno de Aznar no se cumpliera con ninguno de los compromisos que ahora se le endosan a la andaluza de modo descarado, en particular, el AVE (María purísima). Pero esa es otra historia que, como todos los tirabuzones del PP, terminará volviéndosele en contra. Lo que nos ocupa aquí es el feliz hallazgo de que Magdalena Álvarez se haya inclinado por los nombres de tres importantes poetisas para bautizar las tres primeras aviones de Salvamento Marítimo que han entrado en funcionamiento en España. Porque, dicho sea con mucho respeto, fue un compromiso del PP que ha tenido que cumplir la actual responsable de Fomento, el de poner a vigilar las aguas territoriales para que no vuelva a darse un colosal disparate como el del Prestige.