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Teror, en el penúltimo mandato de Juan de Dios

Que el poder es efímero lo sabe ya a estas alturas hasta José Manuel Soria. Y lo aprendió por las bravas este fin de semana el alcalde de Teror, Juan de Dios Ramos, que vio cómo ha quedado algo tocada su imbatibilidad de antaño en el seno de la Agrupación Local del PSC de la villa mariana. Por primera vez en la historia se presentó una candidatura alternativa a la oficialista, y el concejal Pepe Yanez vio cómo su ex compañera de Corporación Chicha González encabezaba una alternativa que alcanzó el 30% de los votos. Los perdedores no hablan de pucherazo en sentido estricto, pero sí han llamado la atención sobre los modales, sobre la gran cantidad de estómagos agradecidos que acudieron a la votación y sobre el comportamiento del alcalde, que acabó con un dedo lesionado. Juan de Dios dio uno de sus tradicionales puñetazos en la mesa en su discurso final sin percatarse de que un bolígrafo iba a desconchabarle. Promete, eso sí, que el presente será su penúltimo mandato. Penúltimo, ¿eh?

Que el poder es efímero lo sabe ya a estas alturas hasta José Manuel Soria. Y lo aprendió por las bravas este fin de semana el alcalde de Teror, Juan de Dios Ramos, que vio cómo ha quedado algo tocada su imbatibilidad de antaño en el seno de la Agrupación Local del PSC de la villa mariana. Por primera vez en la historia se presentó una candidatura alternativa a la oficialista, y el concejal Pepe Yanez vio cómo su ex compañera de Corporación Chicha González encabezaba una alternativa que alcanzó el 30% de los votos. Los perdedores no hablan de pucherazo en sentido estricto, pero sí han llamado la atención sobre los modales, sobre la gran cantidad de estómagos agradecidos que acudieron a la votación y sobre el comportamiento del alcalde, que acabó con un dedo lesionado. Juan de Dios dio uno de sus tradicionales puñetazos en la mesa en su discurso final sin percatarse de que un bolígrafo iba a desconchabarle. Promete, eso sí, que el presente será su penúltimo mandato. Penúltimo, ¿eh?