El Gobierno de Canarias premia al RIU Oliva Beach de Fuerteventura, un hotel en zona protegida y pendiente de demolición

El Gobierno de Canarias ha concedido el premio de Turismo Islas Canarias a la Proyección Internacional del Archipiélago al hotel RIU Oliva Beach, situado en las Dunas de Corralejo (Fuerteventura) -categorizadas como Parque Natural y parte de la Reserva de la Biosfera de Fuerteventura- y pendiente de demolición por incumplir las condiciones de su concesión en dominio público. Costas, dependiente de Ministerio para la Transición Ecológica, tramita desde julio de 2021 la caducidad del permiso a RIU para que siga gestionando el establecimiento, al detectar que acometió presuntas obras irregulares que aumentaron su volumen, en contra de lo acordado.

El pasado 9 de agosto, el Boletín Oficial de Canarias (BOC) publicó el decreto por el que se conceden los premios, que recayó también en la Casa Rural de las Vigas, en Tenerife. Para justificar el reconocimiento al hotel RIU Oliva Beach, el Ejecutivo regional sostiene que la infraestructura, inaugurada en 1977, ha sido “pionera en la apertura de Canarias al mercado turístico europeo, con un factor de dinamización y modernidad en el Archipiélago”. El Gobierno de Canarias también defiende que el hotel ha contribuido al “desarrollo en el empleo local y la riqueza de la Isla”.

El año pasado quedó desierto el mismo premio. Las patronales turísticas de Canarias presentaron para el galardón Turismo Islas Canarias a la Proyección Internacional al RIU Oliva Beach de forma conjunta con el Tres Islas. A pesar de estar respaldada por el Ayuntamiento de La Oliva, municipio donde se ubican los hoteles, y el Cabildo de Fuerteventura, la Consejería de Turismo liderada por Yaiza Castilla no consideró la única candidatura que se postuló y nadie lo recibió.  

Ambos hoteles protagonizan un complejo conflicto entre la Dirección General de Costas y ecologistas, por un lado, que defienden la caducidad de la concesión y su correspondiente demolición, frente a la cadena hotelera, a la que respaldan una plataforma de trabajadores de los establecimientos y todas las instituciones implicadas, desde el Ayuntamiento de La Oliva al Cabildo de Fuerteventura y el Gobierno de Canarias, que defienden que se mantenga el permiso para seguir explotando los hoteles.

Una de las controversias sobre los hoteles de Corralejo tiene que ver con quien debe ejercer la gestión de sus expedientes una vez que el 1 de enero de este año se efectuó el traspaso de competencias de las costas isleñas del Estado al Gobierno regional, entre las que se incluían las autorizaciones para ocupar dominio público.

La cadena hotelera defiende con ahínco que es la autonomía la única administración que debe hacerse cargo de todos los trámites que tengan que ver con el RIU Oliva Beach y el Tres Islas. Por su parte, Costas se reserva la gestión de estos expedientes y ha continuado con los procedimientos; prueba de ello es que el pasado mes de julio volvió a iniciar la caducidad de concesión del Tres Islas después de que el proceso anterior finalizara su plazo máximo.

El consejero de Obras Públicas, Vivienda y Movilidad del Gobierno canario, Pablo Rodríguez, (Coalición Canaria), que gestiona el área de Costas regional, ya se ha pronunciado al respecto: ha defendido que la causa de las discrepancias en la gestión de los expedientes radica en que el traspaso de Costas fue insuficiente porque el Estado se reservó competencias. Y su intención es defender en Madrid que es el Ejecutivo regional quien debe resolver los asuntos relativos a su litoral.