Dover: “No sabemos si somos muy valientes o muy inconscientes”

MADRID, 30 (EUROPA PRESS)

No será hasta el 4 de octubre cuando oficialmente vea la luz lo nuevo de Dover, 'I Ka Kené', pero desde hace semanas ya arrecian las críticas en Internet por lo que sus seguidores consideran un giro inasumible hacia la música africana, algo a lo que estos madrileños están acostumbrados después de su giro desde el rock hacia las pistas de baile con 'Follow the City Lights', su anterior trabajo publicado en 2006.

“Es evidente que trabajamos con mucha libertad, no sé si porque somos muy valientes o muy inconscientes, pero la verdad es que es la única manera que tenemos de trabajar a gusto”, explica a Europa Press Amparo Llanos, guitarrista y compositora de buena parte de las canciones de la formación.

En los noventa Dover se convirtieron en los reyes del rock alternativo en España, la versión patria de sus amados Nirvana, lo cual les granjeó una auténtica legión de seguidores que ahora de nuevo se ven sorprendidos por sus nuevas canciones, cantadas no ya sólo en inglés, sino también en francés y en dialectos africanos.

Amparo relata que todo comenzó cuando conoció a un inmigrante de Mali con el que tuvo una relación muy cercana y éste le dio a conocer mucha música africana. En seguida comenzó a enseñársela al resto de la banda y todos se pusieron a hacer cosas, dentro de una dinámica “muy natural”. “No es que llegara un día diciendo que había tenido una visión”, bromea.

De hecho, la vocalista Cristina Llanos asegura que se alegró mucho cuando se dio cuenta de que iban a “hacer de nuevo otra cosa diferente”, a pesar de lo cual no ha dudado en recalcar que este nuevo trabajo tiene “conexión y continuidad” con 'Follow the City Lights'. “Amparo contagia al resto, son nuevos retos y como nos va la caña, nos ponemos a ello”, apostilla el batería Jesús Antúnez.

“MUY TRABAJADO INSTRUMENTALMENTE”

Antúnez agrega que a pesar de ser un disco con influencias africanas, “las guitarras están trabajadísimas y tienen muchísimo peso”. De hecho, subraya que “instrumentalmente este disco está muy trabajado en las guitarras, el bajo, las percusiones, la batería y las voces”, ya que se han “pegado un currazo increíble”.

Para Cristina “ha sido muy divertido” cantar en este disco, y apunta que “menos de la mitad está en inglés” en esta ocasión. Sobre cantar en francés, ha reconocido que “ahora ya le va saliendo mejor”, aunque tiene que tener cuidado “porque es muy sutil la pronunciación”. “Ahora me pasa que se me olvidan las letras en inglés”, comenta entre las risas de todos.

Amparo señala que lo primero que le llamó la atención de los artistas africanos fueron las guitarras, con “unas acústicas preciosas y unas melodías muy bonitas”. Así, destaca que le ha dado “mucho gustito aprender a tocarlas”, sobre todo porque ella se ve a sí misma como “una guitarrista rítmica”.

Los chicos de Dover están “muy orgullosos” de su trabajo y, como no puede ser de otro modo, y aunque no saben cómo funcionará a nivel de ventas, reconocen que el éxito siempre les “sorprende para bien, gracias a Dios”, al tiempo que Amparo ha apostillado que, en cualquier caso, sea como sea, ellos han hecho el disco que les apetecía en este momento. “Pero tener éxito comercial nos encanta también”, tercia rápidamente Cristina, de nuevo entre carcajadas.

CONCIERTOS EN DICIEMBRE

En los próximos meses, la banda se dedicará a ensayar de cara a unos conciertos que tienen previsto ofrecer en salas de Madrid y Barcelona, pero no será hasta la primavera de 2011 cuando piensen en una gira propiamente dicha. Jesús Antúnez avisa de que las canciones seguirán en la línea de la última gira, cuando los viejos clásicos rockeros fueron renovados para adaptarlos a la nueva deriva bailable, y puntualiza que tal vez introduzcan nuevos arreglos en algunas, en cualquier caso.

Al hablar de tocar en directo todos se ponen nerviosos y se levantan en sus asientos. “Nosotros tocamos con quien sea, con unos grupos nos entendemos personalmente fenomenal, a otros les conocemos menos. Pero siempre tocamos teniendo la sensación de que encajamos. Estamos abiertos a todo y respetando a todos los artistas”, afirma Cristina.

De hecho, Amparo recuerda que alguna vez han tocado en un sitio donde no encajaban y lo pasaron “fenomenal”. Como aquella vez en la que en Ciudad Real compartieron cartel con Kiko Veneno y Los Delinqüentes, ya en su última gira más bailable, “pero el público era total, fue salvaje”, y lo pasaron “genial todos, los músicos y el público”.

Preguntados por cual sería su cartel ideal para un festival, discuten un poco entre ellos, pero en realidad en seguida concretan en Vampire Weekend, banda neoyorkina que ahora mismo tiene mucho tirón en la música independiente a nivel mundial y que también es conocida por sus referencias africanas. “Nos encantan, tienen un directo estupendo y además los chicos nos caen fenomenal”, resaltan Amparo y Cristina casi a la vez.

Mientras el resto discute, Antúnez añade a The Strokes, Tool, Ben Harper o Peter Gabriel -a cuyo concierto en Madrid de la semana pasada acudió y del que salió encantado-. Es entonces cuando las hermanas Llanos ponen la nota más colorida y suman al cartel, de nuevo con una voz conjunta, a la moldava Cleopatra Stratan. El bajista de la banda, Samuel Titos, casi callado hasta ahora, añade a La Roux a su lista de artistas preferidos ahora mismo y todos asienten.

“SI TE GUSTA LA MÚSICA TE GUSTAN MUCHAS COSAS”

Pero si hay algo que sus seguidores no perdonan es que abandonaran su deriva rockera de manera tan fulminante. Cristina cuenta que el otro día vio por casa un disco de Social Distortion y se dijo a sí mismo que lo escucharía “otro día”. Pero no sucede lo mismo con Nirvana, pues asegura que “hace muy poco” rescató su disco 'Nevermind', después de “muchos años sin oírlo así de seguidillo”.

A este respecto Amparo matiza que cuando les piden una lista de canciones preferidas “siempre cae alguna” del 'Nevermind'. “Es que una cosa no quita la otra, una canción es una canción después de todo. Cuando escuchábamos Nirvana porque nos chiflaba, escuchábamos también otras cosas totalmente distintas. Si te gusta la música te gustan muchas cosas”, defiende la guitarrista.