BARCELONA, 29 (EUROPA PRESS)
El cocinero Ferran Adrià ha explicado este lunes al juez que junto a su socio Juli Soler le compraron en 2005 el 20 por ciento de las acciones del restaurante El Bulli que estaba en manos del socio capitalista Miquel Horta “para ayudarle” porque necesitaba dinero ante la grave situación económica que padecía por otros negocios que tenía al margen.
Sin embargo, la familia de Horta cree que Adrià y Soler se aprovecharon de la situación mental de su padre para coaccionarlo y comprarles las acciones por un valor muy inferior a lo que realmente valían, y por eso les reclaman en una querella civil más de diez millones de euros.
Durante la vista que se celebra desde este lunes en la Ciudad de la Justicia, el cocinero ha negado ante la titular del Juzgado de Primera Instancia número 2 de Barcelona que se hayan aprovechado, y ha recordado que Horta invirtió en 1994 en el Bulli en forma de préstamo 47 millones de pesetas y diez años después se le pagaron 200 millones de pesetas por sus acciones.