El Índice de Precios de Consumo (IPC) bajó cinco décimas en julio, gracias sobre todo a las rebajas de verano, pese a lo cual la tasa interanual de inflación siguió subiendo y se situó el mes pasado en el 5,3%, la más alta desde diciembre de 1992. En Canarias el IPC disminuyó un 0,2% en julio, según los datos del Instituto Nacional de Estadística.
La primera caída mensual de precios desde enero vino empujada por la bajada en un 11,3% de los precios del vestido y del calzado, en un mes en el que siguieron subiendo los del transporte por el encarecimiento de los carburantes y los de la vivienda por la subida de la electricidad.
La inflación subyacente -que excluye del índice general los precios de la energía y los alimentos frescos- bajó además nueve décimas en julio, a pesar de lo cual la tasa interanual se elevó hasta el 3,5%.
El mes pasado, subieron sobre todo los precios de la vivienda, un 1,7%, debido al encarecimiento de la electricidad, mientras que la hostelería se encareció el 1% y el transporte subió el 0,7% por el alza de los carburantes y del transporte aéreo.
El ocio y la cultura también subieron en julio, el 1,1%, debido principalmente al encarecimiento de los viajes organizados.
Todas estas subidas fueron contrarrestadas por la fuerte bajada de los precios del vestido y el calzado, que ha permitido la caída mensual del IPC.
Pese a esto, la tasa interanual se sitúa en su nivel más alto en casi dieciséis años empujada sobre todo por el encarecimiento del transporte, que en un año, y por culpa del petróleo, ha subido el 10,6%.
Le siguen los precios de consumo relacionados con la vivienda, que se han encarecido en un año un 8,4% por las subidas de la electricidad.
Los alimentos y bebidas no alcohólicas acumulan en doce meses un alza del 7%, dos décimas por debajo de la registrada en junio gracias a las caídas de los precios del pescado fresco y la leche registradas el mes pasado.
El único grupo de precios que sigue registrando bajadas interanuales es el de las comunicaciones, con una caída de dos décimas en doce meses.
Por rúbricas, las mayores subidas de los precios con respecto al mes anterior se registraron en la calefacción, alumbrado y distribución de agua, con el 3,1% más, seguida de la carne de ovino, que subió un 2,5% y el transporte público interurbano, que lo hizo el 2,4%.
Por el contrario, las bajadas más significativas se produjeron en las rúbricas relacionadas con el vestido y el calzado, como la de ropa de niño y bebé, que bajó el 19,1%; el calzado de niño, el 13,4% más barato y las prendas de vestir de mujer, cuyos precios cayeron el 12,5%.
Los precios bajaron en todas las comunidades autónomas excepto en las Islas Baleares, donde subieron el 0,1%.
La mayor caída se produjo en La Rioja, que redujo sus precios en un punto, seguida de Murcia (0,9%) y Extremadura, Galicia, Andalucía y Asturias con una bajada del 0,7%.
Les siguieron Castilla la Mancha y la Comunidad Valenciana, donde los precios bajaron seis décimas; País Vasco, con el 0,5% menos; Castilla y León y Cataluña, donde cayeron cuatro décimas; Madrid y Aragón, con el 0,3%, Canarias, con el 0,2% y Navarra con el 0,1%menos.
Los precios de consumo se mantuvieron estables en Cantabria se mantuvo estable, y cayeron el 1,4% y el 1% en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, respectivamente.
El INE también publicó este miércoles los datos definitivos del Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA), medido del mismo modo que en el resto de países de la zona euro, que como el índice general bajó cinco décimas mensuales, aunque alcanzó una tasa interanual del 5,3%.